El jurado popular ha declarado culpable de asesinato a Omar Dembelly, el acusado de matar a un joven a cuchilladas en una casa de Solivella (Alt Empordà) el 31 de agosto de 2022. El veredicto, por ocho votos a uno, recoge que el procesado atacó a la víctima con un cuchillo de cocina por sorpresa y sin que se pudiera defender. Además, remarcan que la agresión tuvo lugar en una habitación reducida que los dos hombres compartían y que la víctima no tenía opción de huir. El jurado también considera probado, por siete votos a dos, que el acusado pidió a los compañeros de casa que avisaran a la policía y se entregó. El fiscal, sin embargo, sostiene que no se cumplen los requisitos legales para ser un atenuante de confesión y mantiene la petición de 24 años de prisión.
Acusado y víctima eran de origen gambiano y vivían en una casa situada en la calle Mont número 9 de Solivella donde también convivían otros compatriotas que, como ellos, trabajaban como temporeros en la vendimenta. El jurado popular ha considerado probado que, hacia las 20.45 horas del 31 de agosto de 2022, el acusado atacó a la víctima con un cuchillo de cocina y le asestó dos puñaladas en la región. Las cuchilladas le acabaron perforando el lóbulo superior del pulmón y le provocaron la muerte de manera “inmediata”.
El jurado ha declarado probado por unanimidad que fue el acusado, Omar Dembelly, quien mató a la víctima y se ha basado en el testimonio de los compañeros de casa, que les vieron entrar en la habitación que compartían y “30 segundos después” oyeron gritos de la víctima pidiendo auxilio. También han tenido en cuenta la declaración del propio procesado, que en el juicio reconoció ser el autor de la agresión, pero aseguró que no tenía intención de matarlo.
El veredicto, en este caso por ocho votos a favor y uno en contra, concluye que el ataque fue “por sorpresa” porque el acusado sacó un cuchillo de cocina, que previamente había cogido, de repente, “arrinconó a la víctima” contra una pared de la habitación y le clavó. A la hora de fundamentar esta conclusión, el tribunal popular remarca que la estancia era de dimensiones reducidas y la víctima no tuvo ninguna opción de huir. Tampoco se creen que, tal y como declaró el acusado, la víctima, de 29 años, la atajara primero porque los forenses no le apreciaron ninguna lesión.
La defensa alegaba que el acusado confesó los hechos y colaboró con la justicia porque, justo después de perpetrar el ataque, es pedir a los compañeros de casa que avisaran a la policía y se quedó en el exterior del domicilio hasta que llegaron las patrullas de los Mossos d’Esquadra y lo detuvieron. También entregó el cuchillo de cocina que había utilizado como arma del crimen. El jurado lo declara probado con siete votos a favor y dos en contra.
24 años de prisión
Tras la lectura del veredicto, la magistrada-presidenta del tribunal, Fátima Ramírez, ha disuelto el jurado. El fiscal Víctor Pillado ha mantenido la petición de 24 años de prisión. Según ha argumentado en la sala de vistas, el redactado del supuesto atenuante de confesión que ha apreciado el jurado no es de aplicación porque no cumple los requisitos que marca la jurisprudencia porque el acusado ha mantenido una versión. “de carácter exculpatorio” que no casa ni con las pruebas ni con la decisión del jurado popular.
Aparte de la pena de prisión, también solicita que le impongan 9 años de libertad vigilada y que le expulsen del país una vez cumplidas tres cuartas partes de la condena o cuando acceda al tercer grado, con la prohibición de no poder volver durante 10 años. En concepto de responsabilidad civil, quiere que indemnice a los familiares de la víctima (madre y cinco hermanos) con un total de 340.000 euros por el daño moral.
La defensa, encabezada por la letrada Cristina Casellas, ha pedido que le impongan la pena mínima posible por un asesinato con la atenuante de confesión y también solicita que se acredite realmente la relación de parentesco con los familiares a la hora de determinar las indemnizaciones.
El juicio, que comenzó el lunes en la sección tercera de la Audiencia de Girona, ha quedado visto para sentencia.