Este fin de semana ha sido especialmente negro en la red viaria catalana, con tres víctimas mortales en diferentes accidentes, todos ellos por choques frontales.
El último siniestro se ha producido este domingo por la mañana en la C-12, en el kilómetro 127,5, a la altura de Alfés, en el Segrià. Dos turismos han colisionado frontalmente sobre las nueve menos cuarto de la mañana. Como consecuencia, ha muerto un hombre de 58 años, vecino de Torrebesses, que conducía uno de los vehículos. Además, el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) ha evacuado a una persona en estado crítico, otra con heridas graves y dos más con lesiones menos graves al Hospital Arnau de Vilanova.
El accidente ha obligado a cortar puntualmente la vía en ambos sentidos y ha movilizado a cinco patrullas de los Mossos d'Esquadra, tres dotaciones de los Bomberos de la Generalitat y cuatro unidades terrestres y un helicóptero medicalizado del SEM. Las causas del siniestro aún se investigan.
El viernes ya se habían producido otros dos accidentes mortales: un conductor perdió la vida en un choque frontal en la N-2 en Borrassà, en el Alt Empordà y un motorista murió en la C-31 en Sitges, en el Garraf.
Con estas tres víctimas, ya son 82 las personas que han muerto en las carreteras catalanas este 2025.