Un amplio dispositivo de emergencias ha ensayado este miércoles por la mañana en el aeropuerto de Reus la gestión de un accidente de un avión comercial procedente de Manchester. El ejercicio —coordinado por el aeropuerto y Protección Civil— ha movilizado a más de 250 personas entre personal propio, cuerpos de emergencia, seguridad y figurantes.
El escenario planteado situaba en pista una aeronave con 57 ocupantes (50 pasajeros y 7 tripulantes) que sufría una salida de pista durante el aterrizaje. El balance simulado: 4 víctimas mortales y una cincuentena de heridos, cerca de la mitad en estado crítico. La alerta se ha recibido a las 10.34 h en el 112; pocos minutos después han actuado los bomberos del aeropuerto para sofocar un fuego simulado y hacer el primer triaje. A las 10.50 h han accedido las primeras ambulancias del SEM y, a continuación, Bomberos de la Generalitat y el resto de cuerpos operativos.
De manera paralela se ha constituido el comité de crisis con la dirección del aeropuerto, Subdelegación del Gobierno, Delegación del Gobierno catalán y los ayuntamientos de Reus y Constantí, además de Mossos d'Esquadra, Guardia Civil, Policía Nacional, entre otros. Protección Civil ha activado AEROCAT, el plan especial para emergencias aeronáuticas, y el SEM ha organizado el triaje y el traslado de los heridos a los hospitales de referencia.
El operativo ha habilitado espacios de acogida para ilesos y familiares con apoyo psicológico, y el grupo judicial y de medicina legal ha practicado in situ los levantamientos de las víctimas, bajo coordinación del juzgado de guardia de Reus
La subdirectora de Protección Civil, Imma Solé, ha remarcado que estos simulacros permiten “poner a prueba” tanto el plan de autoprotección del aeródromo como el AEROCAT y “afinar la coordinación” entre servicios para garantizar una respuesta “más eficaz” en caso real. La subdelegada del Gobierno en Tarragona, Elisabet Romero, ha valorado la “buena implicación” y la “coordinación institucional” demostradas.
Estos ejercicios se realizan periódicamente y con escenarios variables, de acuerdo con la normativa aeronáutica y de protección civil, para validar procedimientos y detectar mejoras en la respuesta ante emergencias aéreas.