La Sede Institucional del Puerto de Tarragona ha acogido este martes, 25 de noviembre, la última sesión del ciclo ‘Miradas Metropolitanas’, una jornada impulsada conjuntamente con la Diputación de Tarragona para analizar la dimensión metropolitana del puerto y su capacidad de vertebrar el territorio. La sesión ha contado con las ponencias del presidente del Puerto, Santiago J. Castellà, y de la directora comercial y de desarrollo de negocio, Genoveva Climent, que han expuesto cómo el puerto genera cadenas de valor estratégicas que conectan el Camp de Tarragona con Europa y el Mediterráneo
Bajo el lema “La dimensión metropolitana del Puerto de Tarragona”, ambos ponentes han coincidido en remarcar que la logística moderna “mueve oportunidades y no solo mercancías”. Castellà ha presentado una estrategia de futuro que ya no se basa solo en nuevas infraestructuras marítimas, sino en la transformación territorial que genera la actividad del puerto. “El Puerto de Tarragona no ha sido solo el puerto de la ciudad, sino de todo el territorio”, ha afirmado, subrayando que su función como servicio público es crear actividad y empleo en su hinterland.
Un puerto orientado a la innovación y a la industria de futuro
Castellà ha puesto como ejemplo el posicionamiento del Puerto para convertirse en un hub de la eólica marina flotante, un sector emergente que puede generar un ecosistema industrial basado en la investigación, los nuevos materiales, la informática y las tecnologías avanzadas. En este sentido, ha destacado que las obras de la segunda fase del Muelle de Baleares permitirán acoger el montaje de grandes aerogeneradores destinados a los parques eólicos del Mediterráneo occidental.
El presidente también se ha mostrado optimista en cuanto a la recuperación del tráfico de contenedores, y ha situado el objetivo en 120.000 TEUs anuales una vez se concessionen nuevos espacios como el Muelle de Andalucía como terminal multipropósito. La reactivación del tráfico se verá favorecida por la entrada en servicio del tercer hilo ferroviario con ancho UIC, por la puesta en marcha de la PortTarragona Terminal Guadalajara-Marchamalo y por el incremento de operativa ferroviaria en La Boella.
Castellà ha remarcado la importancia estratégica de la ubicación del Puerto en el punto de encuentro entre el Corredor Mediterráneo, los corredores del Ebro y de Henares, lo que refuerza su posición como nodo logístico del noreste peninsular. También ha destacado la colaboración creciente con el Puerto de Barcelona, así como los trabajos con la Generalitat para impulsar terminales en Lleida y Tortosa, y proyectos compartidos con Aragón.
Además, ha situado la ZAL como clave en el desarrollo de un espacio metropolitano capaz de atraer inversiones industriales internacionales, especialmente asiáticas. “La Generalitat dice que es el terreno industrial más interesante para Cataluña”, ha remarcado.
El Puerto como “corazón” del territorio
Por su parte, Genoveva Climent ha utilizado una metáfora potente para resumir el papel del puerto: “Si el territorio fuera un organismo vivo, el Puerto sería el corazón”. La directora comercial ha recordado que “sin Puerto no hay química, y sin química no hay economía territorial”, en referencia a la importancia crítica del puerto para el sector petroquímico, uno de los motores económicos de la región.
Climent ha destacado que el Puerto actúa como conector metropolitano, generando valor añadido a través de cadenas de valor consolidadas —como las de la agroalimentación, la petroquímica, los productos siderúrgicos, la pasta de papel, la fruta tropical o los vehículos asiáticos— que enlazan el territorio con Europa y con el mundo.
Según Climent, el Puerto aspira a incorporar nuevas cadenas de valor vinculadas a sectores emergentes como la energía eólica flotante, los nuevos combustibles (como el hidrógeno), la valorización del CO₂ o incluso la digitalización avanzada, un ámbito en el que el Puerto puede convertirse en un hub de I+D, crecer en colaboración con la universidad y atraer nuevas empresas tecnológicas.
Una alianza territorial con mirada metropolitana
En su intervención final, Castellà ha defendido que todos estos proyectos solo tienen sentido desde una visión metropolitana y compartida, que integre municipios, empresas e instituciones. “Somos un agente activo de esta alianza territorial”, ha concluido, reivindicando el Puerto de Tarragona como un espacio de consenso y un instrumento para detectar oportunidades y transformar el territorio.