Este martes se celebró el pleno corporativo ordinario del Ayuntamiento de Sant Sadurní correspondiente al mes de septiembre, con la presencia de todos los concejales y concejalas del consistorio y que se prolongó durante una hora, después del período estival de descanso.
En la primera parte se resolvieron varios puntos del área económica, entre las cuales la aprobación de dos relaciones de facturas con reconocimiento extrajudicial de créditos, con la abstención de la CUP y Junts per Sant Sadurní; de la cuenta general 2024 del Ayuntamiento y del Patronato Cultural, con la abstención de la CUP y el PP; y de una modificación de crédito para suplementar el final de la obra del campo de fútbol, que se aprobó por unanimidad. En el ámbito administrativo, se aprobó por unanimidad la autorización de compatibilidad de segunda actividad a dos personas trabajadoras del Ayuntamiento.
El pleno votó el nombramiento del juez de paz titular y suplente del municipio: de las dos candidaturas, se eligió por unanimidad a Jordi Nin i Giménez como juez de paz titular y a Ramon Ibáñez Fonts como suplente.
También se aprobó por unanimidad la moción presentada por la CUP con relación a la autorización ambiental de la cementera ubicada en Santa Margarida i els Monjos, después de aceptar las enmiendas de los otros grupos municipales. En este sentido, la moción expone que la cementera de Els Monjos, propiedad de Cementos Portland Valderrivas (grupo FCC), ha ido modificando progresivamente su autorización ambiental desde el año 2010 para aumentar el uso de residuos como combustible alternativo, sustituyendo parcialmente el coque de petróleo y otros fósiles. En este período se han producido varios incrementos, sin garantizar el trámite de información pública vecinal eficaz, vulnerando la legislación vigente y con varios conflictos de intereses entre los agentes implicados; asimismo, pide revisar la autorización ambiental provisional, exigir valores más estrictos con relación a las emisiones y planes de vigilancia ambientales y más transparencia, controles más estrictos y más participación ciudadana. El concejal, Miquel Pi, que defendió la moción, explicó que esta se ha presentado en varios municipios de la comarca, en cooperación con una veintena de entidades, entre ellas Bosc Verd y Revolta Pagesa, en defensa de la salud y del territorio, dado que varios estudios refuerzan la alerta sanitaria y evidencian riesgos en la salud de las personas que viven cerca de incineradoras.
Los portavoces de los diferentes grupos municipales, que apoyaron la moción, expusieron su visión, coincidiendo en la necesidad de ir todos juntos en la defensa del Penedès, de la salud de la ciudadanía y de la transparencia y la participación ciudadana.
Antes del turno de ruegos y preguntas, dar cuenta de los Decretos y Juntas de Gobierno local del período, así como de varios temas como la aprobación de la contratación del servicio de limpieza de equipamientos municipales (edificios administrativos y edificios educativos); el informe sindicatura de cuentas relativo a la cuenta general de las corporaciones locales del ejercicio 2023 y la rendición de cuentas al Ministerio de Hacienda del segundo trimestre del año.
Ruegos y preguntas
La portavoz del Partido Popular, Mari Carmen Díaz, presentó varias preguntas al plenario, sobre la zona de aparcamiento delante de una farmacia del pueblo, la pintura del cementerio antes de Todos los Santos, el precio de los ventiladores de la escuela La Pau, el volumen de paso de camiones por el cinturón y un par de cuestiones sobre obras; el alcalde, Pere Vernet, y los diversos concejales y concejalas del consistorio, en función de cada área, le dieron respuesta.
El alcalde finalizó el pleno municipal avanzando que el del mes de octubre será el plenario en que se debatirán y se llevarán a aprobación las ordenanzas fiscales para 2026.