El grupo parlamentario de Comuns ha registrado una pregunta al Gobierno de la Generalitat sobre el estado estructural y ambiental del embalse del río Foix, situado en el municipio de Castellet i la Gornal (Alt Penedès), a raíz de los riesgos detectados durante las fuertes lluvias de este mes de julio.
Este embalse, en funcionamiento desde 1928, acumula desde hace décadas una gran cantidad de sedimentos en el fondo, lo que ha dejado inoperativas las compuertas de fondo y ha limitado su capacidad de desagüe. Esto hace que, en situaciones de lluvias torrenciales como las recientemente registradas, el único mecanismo para reducir el caudal sea el aliviadero, con el consiguiente peligro de inundaciones aguas abajo.
Durante los últimos episodios de tormenta, el río Foix se desbordó en municipios como Cubelles y se activaron varios protocolos de emergencia. Aunque la Agencia Catalana del Agua (ACA) ha defendido que el embalse contribuyó a reducir el caudal del río, la falta de capacidad operativa plena genera preocupación tanto por la seguridad como por el mantenimiento de los caudales ecológicos.
Además, ecologistas y expertos reclaman una mejor gestión del pantano para recuperar la calidad ambiental del río y evitar el colapso del ecosistema en la desembocadura, protegida bajo la Red Natura 2000.
Por todo ello, Comuns pregunta al Gobierno:
• ¿Qué peligro representa actualmente el embalse del Foix en episodios de lluvias intensas?
• ¿Cuál ha sido el resultado de los estudios batimétricos encargados por la ACA en 2023? • ¿Tiene previsto el Gobierno actuar para recuperar la funcionalidad de las compuertas inferiores?
• ¿Cómo se garantiza el caudal ecológico y la calidad del agua aguas abajo? • ¿Qué actuaciones de seguridad y restauración medioambiental se han planificado y con qué presupuesto? En concreto, ¿está prevista alguna actuación de limpieza y retirada de sedimentos acumulados en el tramo final del río para evitar efectos de tapón y minimizar los riesgos de inundación en caso de riadas?
Desde el grupo parlamentario se considera urgente abordar esta situación para garantizar la seguridad de las poblaciones ribereñas y preservar un entorno natural de alto valor ecológico.