Los jóvenes agricultores Jordi Majós y Marc Guilanyà, de la demarcación de Lleida, han sido nominados por segundo año consecutivo a los Premios Agroinfluye, unos galardones de ámbito estatal que reconocen la labor de divulgación del sector agroalimentario a través de las redes sociales, especialmente en Instagram.
Los Premios Agroinfluye ponen en valor iniciativas que dan visibilidad al día a día del campo, al producto de proximidad y a la realidad del sector primario, con el objetivo de acercar la agricultura a la ciudadanía y especialmente a las nuevas generaciones. La edición de este año se celebrará en Sevilla, después de que el año pasado tuviera lugar en Zaragoza.
En las Tierras de Lleida, Jordi Majós y Marc Guilanyà son los dos únicos nominados, y en toda Cataluña solo hay tres personas seleccionadas, incluyéndolos a ellos, un dato que pone de relieve el papel activo e innovador del sector agrario leridano a nivel estatal. Esta es la segunda edición en la que Majós y Guilanyà están nominados a los Premios Agroinfluye, un hecho que consolida su labor de divulgación del mundo rural a través de las redes sociales.
Jordi Majós, vecino de Almenar, y Marc Guilanyà, de Gimenells, provienen ambos de familias vinculadas históricamente a la agricultura y desarrollan su actividad principalmente en el sector del cereal en las Tierras de Lleida.
Usan las redes sociales para mostrar el trabajo cotidiano en el campo. A través de sus perfiles, enseñan la maquinaria, los procesos agrícolas y la realidad del trabajo diario. “Somos pocos, pero al menos enseñamos a la gente qué hacemos y de dónde salen los alimentos que comen, porque la mayoría no lo saben”, explica Jordi Majós.
Su labor divulgativa también tiene un fuerte componente de defensa del producto de proximidad. “Promocionamos el producto de proximidad porque lo que viene de fuera no siempre está controlado. Nosotros hacemos las cosas bien, y es importante que la gente lo sepa”, señala Majós, que recuerda que detrás del consumo también hay una cuestión de salud. “No solo está en juego nuestro trabajo, sino también la salud de la gente”, añade.
Majós destaca que el uso de las redes sociales ha contribuido a cambiar la percepción social de la agricultura: “Creo que la gente está más concienciada con la agricultura. Hace dos años casi no había nadie mostrando lo que hacía en el campo, y ahora empieza a haber más gente”. Según explica, esta visibilidad es especialmente positiva para los jóvenes.
Después de que el año pasado su nominación tuviera poco eco en Lleida, este año la situación ha cambiado. “Este año ya es positivo, porque tenemos entrevistas e interés de los medios”, apunta Majós, que valora la visibilidad mediática como una oportunidad para reforzar el reconocimiento del sector agrario del territorio.