Inquilinos de la finca Concòrdia 41 del barrio del Poble-sec de Barcelona denuncian que la empresa propietaria, Urbe Enginova, los quiere "expulsar" de las viviendas para sacarles "mucho beneficio". En una rueda de prensa, los vecinos han lamentado que la propiedad no les ha respondido a las demandas de negociar la continuidad de los contratos de alquiler y han reclamado abrir una "mesa negociadora" para continuar viviendo en las viviendas. De los 14 pisos que hay en la finca, dos están fuera de contrato y uno ya ha recibido una demanda por parte de la propiedad. En el marco de este caso, la portavoz del Sindicato de Inquilinas, Carme Arcarazo, ha advertido que es un año "crucial" para los inquilinos porque estiman que al menos 119.000 contratos caducan en 2026.
De los 14 pisos que forman parte de la finca, 11 tienen contrato vigente y cinco se encuentran en la bolsa de alquiler del Ayuntamiento. Uno de los pisos está vacío porque uno de los inquilinos abandonó la vivienda y dos de los contratos de alquiler ya han caducado -uno ya ha recibido una denuncia judicial por parte de la propiedad y otro ha recibido burofax para dejar la vivienda-, según han explicado los vecinos.
Albert, que lleva 27 años viviendo en la finca y se le acaba el contrato el año que viene, ha dicho que se encuentran en una "situación de incertidumbre" por la falta de respuesta de la propiedad. Después de que la empresa haya enviado varios burofaxes "amenazantes" a los vecinos y una demanda judicial, ha dicho que todo apunta a que quieren sacar "mucho beneficio" con las viviendas.
Según ha explicado Albert, pagaban un alquiler asequible con el anterior propietario y la nueva empresa propietaria no se ha puesto en ningún momento en contacto con ellos desde que adquirió la finca. "Nos pasaron el nuevo número de cuenta por debajo de la puerta", ha afirmado. Según han indicado los inquilinos, el año que viene finalizarán cuatro contratos más y el último lo hará en 2029.
Por su parte, Jacqueline, que lleva más de 11 años viviendo allí y se le acabó el contrato en enero, ha asegurado que ha recibido un burofax por parte de la propiedad. Ha pedido abrir una "mesa negociadora" con la empresa propietaria y ha indicado que la intención de los inquilinos es hacer una negociación colectiva para garantizar que no los echan "fuera" de las viviendas.
El Sindicato de Inquilinas avisa de que es un momento "crucial"
La portavoz del Sindicato de Inquilinas, Carme Arcarazo, también ha pedido "explicaciones" al alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, porque cinco de los pisos están en la bolsa de alquiler y ha lamentado que el consistorio no haya ejercido el derecho a tanteo y retracto en este caso. Según han explicado, la finca, con 14 pisos y dos locales, se vendió por 1,8 millones de euros. Para Arcarazo, Concòrdia 41 es una "nueva Casa Orsola" como "símbolo de una ciudad que se niega a ser expulsada".
La portavoz del Sindicato de Inquilinas ha pedido desbloquear la regulación del alquiler de temporada y ha advertido que es un momento "crucial" para los inquilinos porque en 2026 habrá un "pico" de finalización de contratos. El Sindicato estima que unos 119.000 contratos de alquiler terminarán el año que viene en Cataluña y, por tanto, hay "119.000 hogares que potencialmente pueden ser expulsados de su casa". "Haremos todo lo posible para que planten cara y resistan", ha advertido.