Los Mossos d'Esquadra han puesto en evidencia un aumento notable de las ciberestafas coincidiendo con la llegada del periodo navideño, que incluye también jornadas comerciales destacadas como el Black Friday y el Cyber Monday. En una entrevista concedida a la ACN, Roger Sales, responsable de la Región Policial Virtual, ha subrayado que desde el inicio de la pandemia se ha experimentado un incremento importante de los fraudes digitales por el aumento de la conexión online entre la población.
Sales ha explicado que "por Navidad la estafa específica vinculada a las compras por internet se dispara" y ha recomendado a todo el mundo "ser desconfiados" ante este tipo de incidentes. El año pasado, durante las fiestas navideñas, se registraron un total de 5.519 estafas digitales, siendo las más frecuentes cargos bancarios no autorizados y engaños relacionados con compras en línea o a través de redes sociales.
Tendencias recientes en ciberfraudes
La evolución de los delitos virtuales mantiene una clara tendencia ascendente en los últimos años. En 2023 se contabilizaron 79.415 casos, mientras que a lo largo de 2024 esta cifra subió hasta los 80.913 incidentes. Hasta el 30 de noviembre de 2025 ya se han documentado 73.489 fraudes digitales.
Métodos más habituales y perfiles afectados
Según Roger Sales, una parte significativa de estas estafas está relacionada con transacciones comerciales realizadas por internet, incluyendo inversiones financieras así como compras y ventas tanto en webs legítimas como fraudulentas. También ha destacado el aumento de los engaños vía redes sociales donde los delincuentes publican anuncios falsos: "Una red social es un lugar correcto, es un lugar lícito, pero a veces lo que encuentran allí las víctimas son anuncios de un producto concreto, y este anuncio es fraudulento", ha apuntado.
Además, los cargos no autorizados en tarjetas bancarias, cuentas corrientes o mediante Bizum constituyen aproximadamente el 60% de los casos denunciados. También son frecuentes las suplantaciones de identidad digital —incluyendo estafas conocidas como el engaño amoroso o el fraude del CEO— así como prácticas como el phishing (correos electrónicos falsos), smishing (mensajes SMS fraudulentos) o vishing (llamadas engañosas), todas ellas encaminadas a obtener datos personales y económicos.
Por otro lado, en cuanto al perfil de víctimas habituales, Sales ha remarcado que mientras las personas mayores suelen ser especialmente vulnerables a los fraudes basados en llamadas o mensajes fraudulentos, en los casos relacionados con compras online o estafas por redes sociales predominan adultos entre los 46 y 64 años: "Es un segmento poblacional que está muy conectado y tiene un poder económico que les permite hacer compras por internet".
Nuevas estrategias de los ciberdelincuentes
Además de los métodos tradicionales basados en obtener credenciales de acceso para realizar cargos ilegítimos en tarjetas bancarias, Roger Sales ha alertado sobre tácticas más sofisticadas: "Hasta ahora, el malo tenía tus credenciales de usuario y hacía el cargo en tu tarjeta bancaria, pero ahora, con el segundo factor de autenticación, lo que hace es contactar directamente contigo haciéndose pasar por tu banco y engañándote para que facilites este código y poder hacer ellos la transacción".
Asimismo ha señalado el uso creciente de la inteligencia artificial aplicada a los fraudes: últimamente se han detectado vídeos falsificados donde aparecen personajes famosos animando a hacer inversiones o imágenes manipuladas de entidades bancarias diseñadas para convencer a potenciales víctimas.
Mecanismos preventivos recomendados por los Mossos
Para los agentes policiales es fundamental fomentar medidas básicas pero efectivas contra estos fraudes. Entre ellas destacan evitar comprar mediante enlaces recibidos vía correo electrónico o mensaje SMS; siempre se debería acceder directamente al sitio web oficial de la empresa comercial. También es necesario verificar que admita conexiones seguras indicadas por el prefijo “https”, revisar condiciones sobre devoluciones y confirmar que haya información física real sobre la dirección comercial: "A veces cuando consultas dónde se encuentra aparece un descampado", ha advertido Sales.
Asimismo propone utilizar preferiblemente tarjetas prepago y evitar operaciones desde redes Wi-Fi públicas o dispositivos desconocidos.
Ante cualquier comunicación sospechosa recomienda aplicar el método SANA —Stop (Detente), Analiza, No (no hagas clic ni pagues) Ayuda (pide apoyo): "Esto significa detenerse ante la emoción generada por el mensaje sospechoso recibido; analizarlo con desconfianza; no clicar ni pagar; y pedir ayuda si es necesario", explica Sales.
También sugiere consultar con entidades financieras antes de aceptar ofertas de inversión dudosas y ponerse en contacto inmediatamente con los Mossos si existen sospechas
Campañas informativas y denuncia como herramienta clave
A nivel institucional recuerda que los Mossos impulsan campañas educativas mediante charlas dirigidas a asociaciones vecinales y comerciantes. En caso de sufrir una estafa digital destaca que "el primer paso es denunciar", ya que sin denuncia resulta imposible perseguir penalmente estos actos ilícitos. Añade también la importancia de acompañarla con pruebas documentales detalladas —como capturas de pantalla o comprobantes— para facilitar la investigación policial.
