La Guardia Urbana de Tarragona ha informado de que han conseguido detener a un grupo de menores que durante el mes de octubre se han dedicado a provocar daños muy importantes a los autobuses de la EMT. Los cuatro menores arrestados y el quinto implicado investigado rompieron varios cristales y amenazaron a los dos ocupantes de un vehículo de la EMT logotipado, provocando una sensación de inseguridad e indignación entre el personal.
En primer lugar, el pasado 4 de octubre alrededor de las 17:15 horas, dos de los jóvenes bajaron del bus en la avenida dels Pallaresos de Sant Salvador y comenzaron a lanzar piedras contra el vehículo en marcha hasta que le rompieron el cristal de una de las puertas de la parte trasera. Además, los mismos testigos aseguraron que los individuos habían mantenido una actitud violenta dentro del autobús, enfrentándose con algunos pasajeros y con el mismo conductor. Por suerte, en este caso las imágenes, el marcaje de las tarjetas y la identificación por parte de los presentes facilitó su identificación y posterior detención el 13 de octubre.
Uno de los jóvenes también amenazó a dos de los trabajadores de EMT después de lanzarle piedras al autobús
A continuación, el 7 de octubre al mediodía, una patrulla de la Guardia Urbana fue alertada por la presencia de un menor que estaba causando altercados en el interior de un bus. Acto seguido, tras identificarlo, los agentes descubrieron que se trataba del mismo joven que había lanzado piedras contra un vehículo logotipado de la EMT cuando circulaba por Sant Salvador, al mismo tiempo que amenazó a los dos ocupantes. A pesar de ello, este incidente que se produjo el 9 de junio no fue denunciado.
Estos altercados en el bus propiciaron que una de las presuntas víctimas interpusiera una denuncia por los hechos ocurridos en junio. A raíz de esto, la UIB inició la investigación que acabó con la detención del menor y está investigado por un delito de amenazas.
Otros dos menores rompieron dos ventanas en un autobús a la altura de la N-340
Finalmente, el 17 de octubre, otros dos menores fueron detenidos acusados de provocar daños por un valor de 6.000 euros al romper dos ventanas del lateral derecho de un autobús. Los hechos tuvieron lugar un día antes alrededor de las 20 horas, cuando la conductora de la EMT alertó a la policía porque dos individuos le habían arrojado piedras cuando circulaba por la N-340 en Torreforta. Acto seguido, los mismos testigos ofrecieron una descripción de los agresores y después de una pequeña búsqueda, los localizaron e interceptaron en la calle Riu Glorieta después de que estos intentaran huir. Además, ambos ya habían sido identificados esa misma tarde en Les Gavarres.
De esta forma, la gran actuación de la Guardia Urbana de Tarragona y la crucial colaboración ciudadana y de los trabajadores de la EMT ha permitido localizar y detener a estos cuatro individuos. Aunque muchos de los daños causados todavía están pendientes de valoración, la investigación no ha finalizado con estos cuatro arrestados, ya que habría otro joven considerado como sospechoso que podría haber participado en algunos de los incidentes que ha provocado un gran descontento en la Empresa Municipal de Transporte.
