El Ayuntamiento de Valls ha puesto en marcha en los últimos días un dispositivo especial de vigilancia y control en todo el polígono industrial con el objetivo de fomentar el respeto y mantenimiento de los espacios públicos. El operativo, que combina presencia policial tanto uniformada como de agentes de paisano, se enmarca dentro de una estrategia municipal para combatir los vertidos incontrolados y reforzar la limpieza y la seguridad en el entorno industrial de la ciudad.
La actuación se inició ya la semana pasada con una limpieza intensiva por parte de los servicios municipales en el entorno de los contenedores del polígono, dejando la zona en condiciones óptimas. Esta acción previa de limpieza ha permitido que el operativo de la Policía Local detectara nuevos vertidos irregulares, facilitando la tarea de identificación por parte de los agentes de paisano.
Gracias a la vigilancia discreta, el pasado fin de semana se pudo identificar a varios responsables de vertidos improcedentes. Uno de los casos más graves detectados conllevará la apertura de expediente de sanción por infracción muy grave, con una multa que puede oscilar entre los 3.001 y los 6.000 euros, al tratarse de residuos especiales que requieren una gestión específica para evitar riesgos ambientales y sanitarios. Además, cabe destacar que, de acuerdo con la normativa vigente, la sanción no exime a la persona infractora de la obligación de limpiar la zona afectada.
El Ayuntamiento continuará durante los próximos meses con esta línea de actuación, reforzando los controles y la búsqueda de indicios y pruebas que permitan identificar a las personas responsables de vertidos ilegales. El consistorio hace un llamamiento a la ciudadanía y a las empresas a hacer un uso responsable de las áreas de contenedores y a colaborar en el mantenimiento de la limpieza y la imagen de la ciudad.
