Unas setenta personas se manifestaron este viernes por la tarde en Salou para apoyar al colectivo de manteros de la ciudad y denunciar que sufren persecución policial, después de los dispositivos que los cuerpos de seguridad han realizado en las últimas semanas. La movilización, que contó con la presencia de miembros de la comunidad senegalesa y de otras nacionalidades, se reunió frente al ayuntamiento y posteriormente se trasladaron hasta el paseo Jaume I. Los manteros han reivindicado que son gente pacífica, que no son delincuentes y han lamentado las dificultades para conseguir trabajo y documentación. También han explicado las dificultades para obtener una vivienda, ya que han dicho que muchos arrendatarios los rechazan por su color de piel.
"Llevamos viviendo muchos años aquí pero nada es fácil para nosotros. Ahora nos tratan como criminales, nos dicen que somos muy violentos, pero no es verdad", ha expuesto Dam Diop, miembro de la comunidad senegalesa de Salou. Un compatriota suyo, Moha Diaw, ha afirmado que les es difícil encontrar trabajo porque no pueden "acceder a la bolsa de trabajo del ayuntamiento".
Asimismo, Diaw ha asegurado que han percibido un aumento de la persecución policial, y lo ha vinculado con "las falsedades de Vox". "Antes España no era así, era un país de paz. Hace mucho tiempo que viven inmigrantes y nunca ha habido violencia, y desde que se ha creado Vox hemos comenzado a ver la violencia en España", ha señalado. Diop ha añadido que les "duele mucho" cuando los relacionan con la venta de drogas, y ha subrayado que dentro de la comunidad senegalesa del municipio no hay traficantes. Por todo ello, han dicho que se les hace difícil seguir viviendo en Salou.
En junio los cuerpos policiales realizaron dos actuaciones contra la venta ambulante en Salou. En la primera los manteros cortaron durante casi toda la mañana el paseo Miramar. En la segunda se movilizaron más de 300 agentes y se detuvieron diecinueve personas, dieciocho por presuntos delitos de organización criminal y contra la propiedad industrial, y uno por alterar el orden público. Aquella jornada, el 17 de junio, unas decenas de manteros se enfrentaron a la policía y lanzaron piedras a los agentes. Los manifestantes han destacado que a pesar del dispositivo contra la venta ambulante, todos los detenidos quedaron en libertad.