Solo dos municipios del Camp de Tarragona mantienen los espectáculos taurinos en el Camp de Tarragona: El Morell (Tarragonès) y Miami Platja (Baix Camp). Concretamente, se hacen 'tentativas de vaquillas' en fiesta mayor. La Associació Taurina del Morell celebra hasta el lunes cinco tentativas con vaquillas, una actividad limitada en la plaza a mayores de dieciséis años. La propuesta choca con entidades animalistas como AnimaNaturalis, que la consideran maltrato animal, mientras que la organización defiende que cumple los protocolos y el marco legal. En este contexto, partidos en la oposición del Morell piden hacer una consulta ciudadana al respecto, que en caso de celebrarse, el Ayuntamiento se compromete a que sea vinculante. De momento no hay constancia de ningún grupo impulsor.
Poco antes de las doce del mediodía, el vehículo que ha transportado seis vacas procedentes de L'Ampolla ha llegado al Morell, donde le esperaban para empezar las tentativas de vaquillas. El acto, incluido en el programa de fiesta mayor de Sant Abdó y Sant Senén, ha atraído a un numeroso público, principalmente familias, que se han acercado hasta el recinto dedicado a este espectáculo taurino, uno de los pocos que se mantienen hoy en día en el Camp de Tarragona. Si bien el acceso a la arena está limitado a mayores de dieciséis años, los menores sí que pueden acceder a las gradas acompañados de adultos.
Previo al inicio de las tentativas, un veterinario ha hecho un reconocimiento visual de los animales para constatar su estado de salud y comprobar que todo estaba en orden. Con el visto bueno técnico, los miembros de la asociación taurina del municipio han iniciado la tentativa de vaquillas. Desde megafonía, de donde la música a volumen elevado ha amenizado toda la actividad, se ha recordado previo a cada tentativa que la participación estaba únicamente permitida a mayores de dieciséis años. En la primera de las cinco tentativas de vaquillas, una persona ha tenido que ser atendida por los servicios médicos a causa de lesiones leves después de esquivar a uno de los animales y caer al suelo. "Como máximo son de doce a quince minutos; al animal se le trata muy bien, se le pone un toldo para que no pase calor, dentro del recinto a la vaquilla no se la toca, ni se la pega, ni se le tiran piedras. Quien le hace algo a la vaquilla, automáticamente va fuera", ha afirmado a la ACN Jordi Leal, presidente de la Peña Taurina del Morell. "Tenemos que preservar que la vaquilla esté bien y no sufra, es nuestro objetivo", ha añadido.
Una visión que choca frontalmente con entidades naturalistas, como AnimaNaturalis, quien tilda esta tipología de actos de maltrato animal. "El hecho de que sean vaquillas y no toros aún lo hace más abusivo y con una burla más extrema hacia el animal. Como son animales de corta edad, los jóvenes se envalentonan mucho más. Creo que después del toro embolado y el capllaçat, con la tentativa de vaquillas es donde más sufre el animal por este contacto físico", ha señalado Aïda Gascón. Las cuatro primeras tentativas del Morell se hacen con seis animales diferentes cada vez, con una media de edad de unos dos años. La última tentativa, prevista para este lunes, contará con diez vaquillas. El coste de la actividad, que asciende hasta unos 15.000 euros, es asumido por el consistorio morellense.
Último reducto de espectáculos taurinos en el Camp
El Morell, junto con el núcleo de Miami Platja (Mont-roig del Camp), es el último reducto en el Camp de Tarragona donde se siguen celebrando este tipo de espectáculos taurinos. En el caso de Miami Platja, la tentativa tuvo lugar el fin de semana del 25 de julio. En cuanto al Morell, la organización apunta que hace 38 años que se lleva a cabo y asegura que se ha convertido en una "festividad más del pueblo". Por otra parte, fuentes municipales remarcan que la actividad se hace siguiendo todos los protocolos y que se acoge al marco legal que permite este tipo de actos.
Políticamente tampoco hay consenso unánime hacia esta actividad; desde la oposición, el concejal de ERC Albert Roig pone en duda que se trate de una tradición y asevera que el hecho de que se siga celebrando responde a motivos "electorales". Asimismo, insta al equipo de gobierno actual a impulsar una consulta ciudadana para recoger la opinión de la población, mientras que el alcalde Eloi Calbet se muestra partidario de que en caso de celebrarse, sea impulsada a través de una iniciativa ciudadana. En este sentido, Calbet ha explicado a la ACN que existe un reglamento de participación ciudadana para que quien lo considere lidere la petición y en caso de celebrarse, se compromete a que el resultado sea vinculante.