Tarragona no es solamente una de las joyas del litoral catalán sino que es una de las ciudades más importantes por lo que respecta al patrimonio histórico del territorio. El pasado romano y medieval está presente en el día a día de la ciudad, pero la capital de la Costa Dorada también destaca en todo el país por su oferta gastronómica. De esta forma, uno de los monumentos más icónicos de la costa ha iniciado los trámites para volver a convertirse en un restaurante después de casi veinte años.
Tal como ha adelantado el Diari de Tarragona según fuentes municipales, el consistorio y el propietario del Fuerte de la Reina, declarado Bien Cultural de Interés Nacional, habrían puesto en marcha las conversaciones para volver a convertirse en un espacio destinado a la gastronomía. El monumento del siglo XVIII ya funcionó como restaurante entre 1993 y 2008, cuando fue obligado a cerrar y desmontar toda la instalación porque la licencia no se otorgó correctamente.
El restaurante contaba con una superficie de 3.000 metros cuadrados divididos en dos plantas
Los técnicos de Territorio y la familia Catà habrían iniciado las conversaciones aunque en estos momentos los propietarios no han pedido permiso formal. Aun así, en caso de dar luz verde a esta iniciativa, Tarragona incorporaría un nuevo restaurante emblemático en una instalación que anteriormente contaba con una superficie de 3.000 metros divididos en dos plantas. Además, desde el Ayuntamiento han informado al Diari que "se está ultimando una cuestión urbanística en la parte posterior, que es una zona verde, para el paso de mercancías".
La instalación de un nuevo restaurante en el Fuerte de la Reina puede significar la recuperación de uno de los elementos que jugaron un papel crucial en la época dorada de la ciudad. El patrimonio histórico, el litoral tarraconense y la gastronomía de la zona se unían en un entorno privilegiado para disfrutar de la ciudad en todo su esplendor. Además, aunque se trata de un Bien Cultural de Interés Nacional, este sí podría acoger "actividad económica en el interior".
El restaurante del Fortí de la Reina podría ser la guinda de la rehabilitación del entorno de la playa del Miracle
Aunque la anterior etapa del restaurante que había en el Fortí de la Reina se inició con una 'herida mortal' por las irregularidades con la licencia, la cual nunca obtuvo, en esta ocasión la prioridad sería crear un proyecto que pueda perdurar en el tiempo. Tras un largo proceso judicial que llegó hasta el Tribunal Constitucional, durante el otoño de 2008 el restaurante cerró y antes de acabar el año ya iniciaron su demolición.
La llegada de un restaurante no significaría solamente la recuperación de un espacio icónico de la ciudad, sino que también consolidaría el cambio que está experimentando la zona de la playa del Miracle. El derribo del 'mamotreto' y la renaturalización de su entorno, la reapertura del Fortín de Sant Jordi o la renovación del restaurante Mas Rosselló son solamente algunos de los cambios que quieren convertir el espacio en un nuevo motor económico y cultural del municipio. Sin embargo, todavía hay un largo proceso por delante para que los tarraconenses puedan volver a disfrutar de gastronomía local en un espacio privilegiado como el Fortín de la Reina, quien después de 16 años cerrado parece que ha puesto en marcha la cuenta atrás para su rehabilitación.