Los Mossos d'Esquadra detuvieron este miércoles en Falset a cuatro hombres de entre 33 y 43 años como presuntos integrantes de un grupo que se dedicaba a vender drogas al por menor a pie de calle. El pasado mes de mayo, los investigadores tuvieron constancia de que un hombre lideraba la actividad desde un domicilio de la calle Sant Francesc Xavier de Falset. Allí se almacenaban los estupefacientes, mientras que la venta se hacía en la calle.
Según la investigación, el grupo utilizaba para distribuirlos otro domicilio ubicado en la calle Miquel Barceló del mismo municipio. Los Mossos observaron que muchas personas frecuentaban diariamente y a cualquier hora las dos calles, así como la de Sant Marcel, para comprar básicamente cocaína y hachís.
Esta concurrencia, según el comunicado policial, generó inseguridad e inquietud vecinal. Los mossos determinaron que la vivienda de la calle Sant Francesc Xavier, donde residía el líder del grupo, es donde almacenaban las drogas y el dinero ante la posibilidad de una actuación policial.
A medida que avanzaba la investigación, el principal responsable detuvo esta actividad ilícita en varias ocasiones y pidió al resto de implicados que extremaran las precauciones para evitar la presión policial. Tres hombres se distribuyeron las funciones para poder traficar en el vestíbulo del bloque de viviendas de la calle Miquel Barceló, o incluso directamente en la vía pública, según los Mossos.
Durante prácticamente cuatro meses de vigilancias y actuaciones policiales, los investigadores recogieron todos los indicios necesarios y llevaron a cabo un total de seis intervenciones de sustancias entre diferentes compradores. Investigadores y agentes de Seguridad Ciudadana que efectuaban servicio de paisano, confirmaron que el jefe del grupo era quien primero hacía la transacción. La persona interesada en adquirir sustancias le llamaba a un teléfono móvil y después de acordar la cantidad y el precio, daba el visto bueno a los dos vendedores. Por su parte, el cuarto hombre únicamente se dedicaba a controlar la zona pero al igual que el resto, era imprescindible para garantizar que se pudieran hacer las transacciones.
Este miércoles, alrededor de las siete de la madrugada, un dispositivo policial accedió a las dos viviendas con un mandato judicial. En la de la calle Miquel Barceló, se detuvieron a tres hombres y se intervinieron 26 envoltorios de un gramo de cocaína que vendían al por menor a 50 euros cada uno. De hecho, también se localizaron varias cantidades de billetes fraccionados de esta cantidad, así como dos básculas digitales de precisión, varios teléfonos móviles y otros elementos para la preparación de los envoltorios.
En cuanto al domicilio de la calle Sant Francesc Xavier, donde se detuvo al jefe de este grupo familiar, los mossos confiscaron más de 30 gramos de metanfetamina con un valor en el mercado ilícito de sustancias de cerca de 1.000 euros. Asimismo, los agentes encontraron más de 20.000 euros repartidos en diferentes escondites.
La investigación continúa abierta con la previsión de poder efectuar nuevas detenciones en las próximas semanas. Los cuatro detenidos, a los que se les atribuye seis supuestos delitos de tráfico de drogas, ingresaron en prisión después de pasar este jueves a disposición del juzgado de Falset.