La Policía Nacional, con la colaboración de la Policía Local de Vila-seca ha desarticulado una trama criminal en la provincia de Tarragona que se dedicaba a vender contratos de alquiler fraudulentos para conseguir empadronamientos. Según ha informado la policía española, el dispositivo ha acabado con 32 personas detenidas por estar relacionadas directamente con la trama.
Concretamente, los agentes localizaron 17 domicilios donde se habían realizado 40 empadronamientos falsos, la mayoría en Vila-seca. Casi todos los inscritos extranjeros se encontraban en situación irregular en España y pagaban hasta 600 euros por cada empadronamiento fraudulento. Según la Policía, los detenidos redactaban y vendían contratos de alquiler fraudulento para conseguir empadronamientos que después utilizaban para conseguir autorizaciones de residencia en España y tener tarjeta sanitaria en Cataluña.
Primero, los detenidos pedían una nota simple al registro de la propiedad y a continuación fabricaban los contratos de alquiler, que eran completamente falsos. Por este motivo, la Policía considera que eran un grupo criminal “de alto grado de sofisticación”. Todos los detenidos están acusados de delito de favorecimiento de la inmigración ilegal.
