Vilafranca del Penedès ha vivido un curso político “intenso, transformador y con rumbo claro”, según ha asegurado el alcalde Francisco Romero en un encuentro con los medios de comunicación en el Vinseum para hacer balance del primer tramo de mandato. Acompañado por miembros del equipo de gobierno, Romero ha repasado una etapa marcada por el impulso de cientos de actuaciones, la recuperación de la alcaldía por los socialistas y un compromiso firme con la ciudadanía. “Ha sido un tiempo de acción, consenso y compromiso. Gobernar es escuchar, hacer y avanzar para transformar Vilafranca”, ha remarcado, reivindicando que “esto solo se puede hacer caminando al lado de la gente, en los barrios, con proximidad y diálogo”.
Con este espíritu, el alcalde ha defendido que ya se han puesto en marcha un 65% de las propuestas electorales, una cifra que el 4º teniente de alcalde de Servicios a las Personas y Promoción Social, Miquel Medialdea, ha elevado al 73% sumando acuerdos con otras fuerzas. “Nos pusimos como objetivo comenzar a impulsar todo aquello que depende de nosotros. Y lo estamos haciendo con rigor y mirada estratégica”, ha asegurado Romero.
Cinco ejes clave para una ciudad que avanza
Medialdea ha detallado las cinco grandes líneas de actuación del gobierno municipal: una ciudad para las personas, comprometida con la sostenibilidad, la vivienda digna, el impulso económico y una gobernanza basada en la proximidad. “Cualquier equipo de gobierno ha de estar para atender a las personas. Esta es nuestra prioridad”, ha afirmado el teniente de alcalde.
Entre las actuaciones destacadas, sobresalen:
Vivienda digna y pública: promociones como las del carrer Vidal o Ferran, iniciativas como la del Sostre Cívic y la cesión de tres solares al plan de los 50.000 viviendas de la Generalitat. Romero admite que la presión inmobiliaria es grave: “Vilafranca ha sido declarada zona de mercado tenso y esto nos obliga a actuar con urgencia y con consenso”.
Transformación urbana: reurbanizaciones en todos los barrios, aparcamientos disuasorios como los del Molí d’en Rovira y actuaciones ambiciosas como la del carrer Sant Pere, que se presentará a la nueva Ley de Barrios.
Sostenibilidad y transición energética: instalación de placas fotovoltaicas, cambio a LED del alumbrado público, creación de la Oficina Municipal de Energía y un descenso del 43,6% en el gasto eléctrico municipal.
Nuevos equipamientos y servicios: remodelación del Pabellón de Hockey, nueva biblioteca en el carrer Comerç, mejoras en los centros educativos y una apuesta clara por la formación y el talento con cinco nuevos ciclos de FP y el programa InsightPenedès.
Seguridad y convivencia: el Plan Local de Seguridad con 86 medidas, la ampliación de la Policía Local hasta 77 efectivos, la consolidación de los serenos y la futura nueva comisaría en el solar de la antigua caserna de la Guardia Civil.
Romero ha puesto en valor “el trabajo codo a codo con entidades, profesionales e instituciones” y ha agradecido a las fuerzas políticas que han apostado por el diálogo. “Es una manera de hacer política que nos diferencia, una manera de sumar desde la diversidad y la responsabilidad”.
Una alcaldía que escucha a los barrios y el latido de la ciudad
Desde la puesta en marcha de la Alcaldía de Proximidad, Romero ha recorrido los barrios de la villa para escuchar inquietudes, recoger propuestas y dar respuesta. “Este formato ha permitido abrir una nueva etapa en la política municipal”, ha afirmado. Ya han hecho dos rondas de visitas y se está iniciando la tercera. El contacto directo también ha servido para detectar carencias en equipamientos y seguridad, y actuar con celeridad.
Un ejemplo es la inversión en plazas infantiles y espacios públicos como la plaza Cànaves, así como la respuesta a fenómenos climáticos extremos como la DANA del 12 de julio, que causó graves afectaciones al hospital comarcal y al complejo acuático.

El impacto de la DANA: un punto de inflexión
Romero ha detallado las afectaciones y la gestión tras el episodio de lluvias intensas. “Fue una DANA con toda regla, con registros de hasta 170 litros por metro cuadrado en un solo día. Lo más crítico fue el hospital”, ha explicado. Las urgencias y consultas se han ido reorganizando, pero el impacto logístico ha sido “muy complejo”. El alcalde ha reconocido “la gran labor de los profesionales sanitarios” y ha avanzado que la apertura progresiva podría llegar en agosto.
También ha admitido que ha habido críticas del comité de empresa por falta de escucha. “Es normal que el comité defienda a sus trabajadores. Yo he pedido al consorcio que se les tenga en cuenta en todas las reuniones”, ha dicho.
La situación ha dejado aprendizajes claros: intensificar el mantenimiento preventivo, revisar los planes de protección civil y reforzar las infraestructuras críticas. “Habrá un antes y un después en la manera como diseñamos y protegemos estos espacios”, ha concluido.
Cultura, conocimiento e identidad
El mandato también ha puesto énfasis en la apuesta cultural y científica de la ciudad. Vilafranca es ya la sede de la primera Cátedra de Viña y Cambio Climático de Cataluña y el VINSEUM ha sido declarado Museo de Interés Nacional. “Es una apuesta por la cultura como motor de transformación e identidad”, ha apuntado Romero.

Además, se ha inaugurado la nueva biblioteca y hay debate abierto sobre los usos del antiguo hospital: mientras PSC y ERC apuestan por la Escuela de Música, Vilafranca en Comú reclama un espacio para la gente mayor. Romero admite discrepancias pero asegura que hará falta una visión a largo plazo.
Mirando al futuro: liderazgo, sostenibilidad y ciudad viva
El alcalde ha cerrado la comparecencia con una mirada al futuro: “Continuaremos desplegando políticas que sitúen Vilafranca como una ciudad puntera en cohesión social, con la vivienda como derecho, la energía neta como motor de cambio, la cultura como identidad y el diálogo como herramienta de gobernanza”.
Con más de 100 actuaciones puestas en marcha en 2025, el equipo de gobierno confía en consolidar un modelo de ciudad “más verde, justa, conectada, segura, educativa y participativa”. “No solo queremos resolver retos, queremos crear oportunidades. Una Vilafranca para vivir mejor, para crecer, para echar raíces”, ha concluido Romero.