Los Mossos d'Esquadra han localizado dos perros y dos conejos de indias desnutridos en un domicilio familiar de Tossa de Mar y han detenido a su propietaria, una vieja conocida de las autoridades. La arrestada es una veterinaria inhabilitada que ya estuvo en dependencias policiales por casos similares. De esta forma, los agentes de la policía catalana la han acusado de los delitos de maltrato animal y de quebrantamiento de condena por seguir trabajando de forma ilegal.
Tal y como ha avanzado Ser Catalunya-Ràdio Girona, las primeras denuncias contra la veterinaria se remontan a 2012 y actualmente se encuentra detenida en la comisaría de Blanes. Además, la acusada ingresó en prisión durante el año pasado, acusada de provocar la muerte y el sufrimiento de decenas de animales.
La mujer había roto su condena y volvió a ejercer ilegalmente en su casa
La policía catalana consiguió detener a la mujer ayer alrededor de las nueve y media de la noche en la comisaría de Blanes. Los agentes intentaron localizarla en su casa, pero como no la encontraron, la acusada se presentó poco después en dependencias policiales. Al llegar, los Mossos le comunicaron su sospecha de que tenía animales en su domicilio de Tossa de Mar, lo cual tenía totalmente prohibido. El juzgado le negaba explícitamente "desarrollar cualquier actividad relacionada con el trato, la profesión, el oficio, la protección o el comercio que tenga por objeto los animales o su tenencia".
Al llegar al domicilio de Tossa de Mar, los Mossos d'Esquadra y la Policía Local localizaron dos perros y dos conejos porcinos desnutridos y en mal estado. Por este motivo, una vez la exveterinaria se presentó en comisaría, la detuvieron por un delito de maltrato animal y quebrantamiento de condena por ejercer sin permiso. Las primeras denuncias la acusaban de cobrar por servicios que no prestaba, maltrato animal, falsificaciones e intrusismo profesional.
La detenida fue inhabilitada en tres ocasiones y tenía prohibido relacionarse con animales
Por si no fuera suficiente, el Colegio de Veterinarios de Girona la inhabilitó en tres ocasiones (2011, 2012 y 2015). Además, en 2017 un juzgado la condenó a no poder ejercer como veterinaria por las múltiples infracciones que había cometido. Incluso, los Mossos y la Policía Local han asegurado que en la finca familiar de Tossa de Mar localizaron cerca de una noventena de cadáveres de gatos y perros, lo que agrava la situación de la detenida.
Gracias a una investigación de la policía, descubrieron que la mujer operaba a los animales en su propio domicilio sin ningún tipo de medida higiénica. Además, hacía visitas a domicilios a precios económicos que cobraba en efectivo o Bizum y utilizaba su casa como guardería de animales aunque vivían en condiciones inadecuadas. Por otra parte, el 9 de julio del año pasado, los mossos de investigación de Santa Coloma de Farners detuvieron a la mujer por los delitos de intrusismo, estafa y maltrato de animales domésticos. El juzgado la envió a prisión y también le prohibió acercarse a animales. Al cabo de un mes, sin embargo, la mujer pagó la fianza y salió en libertad provisional a la espera de juicio. Por este motivo, la última detención haría que la veterinaria sancionada vuelva a ingresar en prisión después de romper su condena y seguir siendo un peligro para los animales.