Unas 70 personas han protestado este lunes delante del número 69 de la calle Agudes de Girona, para evitar el desahucio de una madre con tres hijos de un piso municipal del Ayuntamiento. El objetivo era evitar la entrega de llaves por parte de la mujer a personal del consistorio, prevista a las diez de la mañana. La concentración la ha convocado el Sindicato de Vivienda Socialista de Girona que ha cargado contra el Ayuntamiento y dice que "no hay diferencia con un desahucio de un piso de un fondo buitre". Ahora se prevé que el lanzamiento pase a tener fecha abierta, o sea que se pueda producir en cualquier momento en un período determinado. El consistorio al·lega "reiterados incumplimientos" por parte de la família en el pago y seguimiento de los servicios sociales.
Desde una hora antes del desahucio, cerca de 70 personas convocadas por el Sindicato de Vivienda Socialista de Girona se han concentrado delante del número 69 de la calle Agudes de Girona. En uno de los pisos del bloque vive Nouama con sus tres hijos desde hace unos diez años y que el Ayuntamiento quiere desahuciar por los "reiterados incumplimientos" tanto en el pago, como en el seguimiento por parte de los servicios sociales. En concreto, el consistorio argumenta que la mujer debe unos 18.000 euros en concepto de alquiler social y asegura que no estaba haciendo el seguimiento del plan de trabajo necesario para optar a estas viviendas. A todo esto, el Ayuntamiento de Girona concreta que habían detectado que la vecina no vivía siempre en el piso que tenía cedido.
Por todos estos motivos, estaba previsto el lanzamiento administrativo contra Nouama este lunes, pero finalmente, no se ha acabado produciendo. Los concentrados esperaban que algún funcionario del Ayuntamiento -previsiblemente agentes de Policía Municipal- se personaran en el piso para que la mujer les entregara las llaves.
La protesta ha evitado que se produjera esta situación y Nouama ha vuelto a su casa, después de dos horas y media de concentración. La portavoz del Sindicato de Vivienda Socialista de Girona, Fàtima Aatar, señala que el Ayuntamiento "miente" y dice que sólo admite la acusación de impago, que justifica, sin embargo, por la situación personal de la vecina.
En este sentido, Aatar explica que se trata de una mujer separada con tres hijos y que no ha podido afrontar los aproximadamente 200 euros de alquiler, pero explica que desde febrero tiene un nuevo trabajo y que "siempre ha tenido la intención de pagar" hasta que el consistorio le dijo que "ya no hacía falta" porque estaba previsto desahuciarla. Esto, señala Aatar, ha provocado "angustia" a la vecina que está de baja laboral por este hecho.
Además, desde el sindicato explican que ha pedido una rebaja del alquiler y el fraccionamiento de la deuda siempre que ha tenido ingresos. En relación con el seguimiento por parte de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Girona, Aatar explica que desde hace pocos días tienen un informe de vulnerabilidad de Nouama, donde se explica que sí que ha habido seguimiento desde 2017. Una documentación que, según la portavoz, han entregado al Ayuntamiento sin que haya habido "ninguna respuesta".
Fecha abierta
La concentración de este lunes ha servido para constatar que no se ha hecho la entrega de llaves, tal como estaba previsto. Esto hace que, previsiblemente, se acabe informando a Nouama de que el desahucio pasa a tener "fecha abierta". En la práctica, quiere decir que habrá un período de tiempo determinado, en que se puede hacer efectivo en cualquier momento.
Una posibilidad que "preocupa especialmente" al sindicato que lamenta la situación y pide al equipo de gobierno municipal que "detenga" el desahucio. "Esto se puede frenar si Guanyem Girona quiere frenarlo", remarca Aatar.
"Caso flagrante de fraude"
En un hilo en la red social X, la concejala de Igualdad y Justicia Social de Guanyem Girona, Amy Sabaly, señala que la vecina hace ocho años que no paga el alquiler, fijado en unos 200 euros, "a pesar de tener ingresos". También argumenta que tienen constancia de que ha hecho un "uso fraudulento" del padrón municipal, ya que ha permitido empadronarse a varias personas en su domicilio. Finalmente, Sabaly asegura que la mujer "ha generado conflictos" con el resto de vecinos del bloque y destaca que el Ayuntamiento "actúa para poner la vivienda de nuevo a disposición de la ciudadanía".