La concejala de Igualdad y Justicia Social del Ayuntamiento de Girona, Amy Sabaly, ha denunciado públicamente a través de las redes sociales la situación vivida este fin de semana en la piscina municipal de Figueres, donde se le impidió la entrada a ella y a su familia por no disponer de los documentos de identidad de todos los miembros del grupo.
Según ha explicado Sabaly, a pesar de tener intención de disfrutar de una tarde en familia, no pudieron acceder a las instalaciones porque no todos los miembros, incluidos los menores de entre 12 y 16 años, llevaban DNI, NIE o pasaporte. “Nos han impedido la entrada sin DNI, NIE, pasaporte incluso a los menores de 12 a 16 años”, ha escrito la concejala en una publicación que ha generado debate en las redes sociales.
Sabaly, de la CUP, ha expresado su malestar afirmando que se trata de“una norma que convierte el ocio en un obstáculo” y ha lamentado que “se pongan barreras a los derechos de los niños”.
Desde el equipamiento municipal detallan que se trata de una norma general pensada para combatir comportamientos incívicos dentro de las instalaciones deportivas y para saber cuál es el precio que debe abonar cada persona según su edad.