Los Mossos d'Esquadra se han puesto manos a la obra con la investigación de un caso que ha alertado a una pequeña población de Girona. Esta última semana, el pueblo de menos de doscientos habitantes de Palau de Santa Eulàlia ha registrado siete robos dentro de domicilios, provocando una gran sensación de inseguridad entre los residentes.
Tal como ha informado El Caso, entre el jueves 11 de diciembre y el martes 16, los ladrones aprovecharon para robar en una decena de domicilios, muchas de ellas segundas residencias. De esta forma, algunos de los propietarios se podrían haber dado cuenta días más tarde, cuando los delincuentes siguieron el mismo modus operandi y robaron por la noche en casas donde tenían la certeza de que no había nadie.
Los robos tuvieron lugar entre el jueves pasado y este martes
La policía catalana recibió las denuncias y después de abrir la investigación se dieron cuenta de que los ladrones habían desconectado la electricidad para dejar totalmente inutilizada la alarma de seguridad. Aun así, en estos momentos los mossos continúan trabajando para localizar a los individuos, los cuales todavía no se ha aclarado si se tratarían de los mismos, de un 'lobo solitario' o de diferentes personas que han perpetrado todos los robos en menos de una semana.
Igualmente, los profesionales de la Unidad de Investigación ya conocen que los ladrones se llevaron dinero y joyas de los siete robos. De esta forma, los Mossos d'Esquadra han decidido intensificar las vigilancias en Palau de Santa Eulàlia con el principal objetivo de detener esta oleada de robos que ha golpeado a la población de 192 habitantes.
Por otro lado, desde el diario Empordà Info han explicado que los vecinos y vecinas estiman que los ladrones han robado en más de siete casas, pero que muchos de los propietarios todavía no se han dado cuenta porque no son primeras residencias. Incluso, han explicado que los robos podrían afectar a una decena de casas, por lo que los ladrones habrían atacado cerca de un 20% de los inmuebles del pueblo, provocando un grave estado de alarma entre los vecinos.