Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) sigue su proceso de descarbonización y de sostenibilidad, y ahora suma la flota de vehículos de mantenimiento ferroviario adjudicando después de una licitación pública una nueva fresadora 100% eléctrica y dos vehículos ligeros eléctricos con tres plataformas. En paralelo, y aún en fase de licitación, adquirirá dos nuevas dresinas 100% eléctricas para el mantenimiento de la catenaria de la red de metro.
La empresa austriaca Linsinger, por un coste total de 20.312.270€, será la encargada de suministrar la fresadora 100% eléctrica en un plazo máximo de 40 meses, es decir, a finales de 2028. Los dos vehículos ligeros con las tres plataformas, llegarán a mediados del año que viene de la mano de la empresa madrileña Acygs Sales Management por un precio total de 452.352,45€. El coste de estas dos licitaciones suma un total de 20.764.622,45€.
Mientras que, a la espera de la adjudicación, el presupuesto base de la licitación de las dresinas eléctricas es de 4.235.000 € (IVA Incluido).
Más confort para los usuarios y menos contaminación atmosférica
La adquisición de estos nuevos vehículos auxiliares ferroviarios permitirá eliminar las emisiones de diésel, trabajar de una forma 100% sostenible y mejorar el ambiente de trabajo de los operarios. El nuevo material móvil ayudará a realizar trabajos en las vías de una forma más precisa y óptima. La fresadora conseguirá tratar el carril, eliminar todos los desperfectos que tengan y restaurar el perfil correcto. De este modo se devolverá el carril a los parámetros adecuados para una óptima prestación de servicio y, consecuentemente, se alargará su vida útil. Las nuevas dresinas eléctricas dispondrán de una plataforma para elevar a los operarios y poder realizar específicamente trabajos de inspección y reparación de catenaria. Finalmente, los otros vehículos auxiliares ferroviarios adquiridos son dos vehículos ligeros, estilo buggy, adaptados para circular sobre carril que permitirán trasladar operarios y, gracias a las plataformas, mover pequeños equipamientos necesarios durante los trabajos de mantenimiento de las vías y la catenaria.
Mantenimiento nocturno diario
Una vez cae la noche y el servicio del metro deja de funcionar para los usuarios, el ritmo en las vías no se detiene. El equipo de mantenimiento revisa y actúa, cada noche, ante los desperfectos que pueda haber en toda la infraestructura ferroviaria. Es un trabajo a contrarreloj, ya que deben actuar desde el momento en que se detiene la circulación de trenes hasta la toma de servicio del día siguiente. En un lapso de tiempo de menos de cuatro horas los operarios deben ejecutar todas las tareas de mantenimiento necesarias.