Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) y la Associació de Músics del carrer i del metro de Barcelona (AMUC), con la mediación del distrito de Ciutat Vella y del Institut de Cultura, pusieron en marcha en 2001 un proyecto pionero para establecer las bases de la presencia de músicos en unos puntos concretos y señalizados de la red de metro. La iniciativa, inspirada en el metro de Nueva York, se ha convertido en estos 25 años en todo un referente en Europa. Actualmente hay 50 puntos de música donde los músicos ofrecen actuaciones en directo en diferentes horarios y días de la semana y ahora estrena imagen gráfica y una denominación más inclusiva: “Música al metro”.
Hoy, desde las 10 horas y hasta las 23.30 horas, la estación de Universitat es el escenario de las actuaciones del Festival anual. Desde los primeros años de esta alianza se han ido celebrando festivales que han tenido una gran acogida por parte del público. La singularidad de encontrarnos ante un gran fenómeno multicultural y multiestilístico sin precedentes hace que el suburbano de Barcelona sea una vez al año el epicentro de la música urbana. El momento culminante de este año se producirá a las 22 horas, con un combo de diferentes instrumentos y voces
Imagen y nombre renovados
El proyecto de convertir un espacio como el metro en una plataforma de promoción de nuevos talentos y de difusión de la música llega a los 25 años con una renovación que incluye un cambio de nombre, de imagen y la revisión de los puntos hasta ahora establecidos.
Así, el replanteamiento de la iniciativa ha servido para revisar los puntos señalizados y ajustar su ubicación en función de las obras previstas y de los cambios en los flujos de pasaje. También se cambia el nombre, de “Músicos del metro” a “Música en el metro” para hacerlo más inclusivo desde la perspectiva de género, al tiempo que se estrena imagen gráfica, con distintivos más grandes y visibles, de diferentes tonalidades y perfiles de artistas.
El proyecto de regulación de los músicos del metro de Barcelona es pionero en Europa. El objetivo es generar espacios amables en la red de metro, garantizar la calidad de la música que se ofrece a los usuarios del metro y facilitar las funciones preventivas de control para su buen funcionamiento, regular la actuación de los músicos para hacerla compatible con el desarrollo normal del servicio en el metro. Al mismo tiempo, se ofrece a los intérpretes un espacio de promoción y de difusión de su música, convirtiendo el espacio público en una plataforma para los creadores más emergentes.
Durante estos 25 años se han consolidado también las pruebas de idoneidad que se celebran periódicamente para garantizar una buena calidad musical y dar respuesta al incremento de las solicitudes para tocar en el metro. Se trata de una fórmula de validación para calificar de manera objetiva y personalizada el nivel artístico de los candidatos a través de unas audiciones valoradas por profesores de la Escuela de Música de Ciutat Vella. Superada la prueba, los y las artistas se inscriben como miembros de la AMUC para conseguir la acreditación que les permitirá tocar en los diferentes puntos habilitados en la red de metro. La AMUC también se encarga de gestionar el reparto de la parrilla disponible por horario y espacios para mantener las condiciones oportunas de convivencia entre música y personas usuarias.
El proyecto de los músicos del metro forma parte de TMB Cultura, el proyecto cultural de la Fundació TMB que establece vínculos entre los ciudadanos y las asociaciones culturales de Barcelona y el área metropolitana con la voluntad de aproximar la cultura a la ciudadanía a través de sus instalaciones y de enriquecer la experiencia del viaje en transporte público.