Un joven de 23 años y vecino de Viladecans murió ayer domingo en un accidente de tráfico en la autovía A-2, a la altura de Sant Feliu de Llobregat. Según informó el Servei Català de Trànsit, los Mossos d’Esquadra recibieron el aviso poco antes de las dos de la madrugada, cuando un vehículo con cuatro ocupantes salió de la vía por causas que se estaban investigando.
El joven ocupaba el asiento del copiloto y resultó herido crítico. Fue trasladado al Hospital de Bellvitge, donde acabó muriendo horas más tarde. Los otros tres ocupantes del vehículo sufrieron heridas de carácter leve. Dos de ellos, uno de los cuales era menor de edad, fueron trasladados al Hospital Vall d’Hebron, y el otro, al Hospital Moisès Broggi.
Los Mossos d’Esquadra detuvieron al conductor del vehículo como presunto autor de un delito de homicidio por imprudencia grave.
A consecuencia del accidente, se movilizaron cuatro patrullas de los Mossos d’Esquadra, dos dotaciones de los Bomberos de la Generalitat y cinco unidades del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM).
Con esta víctima, el número de personas muertas en las carreteras catalanas este año ascendió a 88.
