El portavoz del Grupo Municipal de Junts per Sabadell, Lluís Matas i Bertran, ha anunciado que trasladará a la dirección nacional del partido las “irregularidades de forma” que asegura haber detectado durante la asamblea local del pasado 11 de noviembre, celebrada en el Casal Pere Quart. Según el concejal, durante la convocatoria se produjeron anomalías que podrían haber influido en el sentido del voto de los militantes y, en consecuencia, haber puesto en riesgo la validez del resultado y de la propia asamblea.
Matas remarca que el objetivo de llevar el caso a los órganos competentes de Junts per Catalunya es “alertar” y pedir que se verifique si el desarrollo de la reunión cumplió con los procedimientos internos o si hubo fallos que haya que revisar. El portavoz, que no ha detallado públicamente qué irregularidades ha detectado, sí subraya que cualquier asamblea debe garantizar “transparencia, rigor y corrección procedimental” para preservar la confianza de la militancia.
La posición del grupo municipal llega en un contexto interno tenso en Junts per Sabadell, después de que la asamblea votara —por un estrecho margen— la salida del gobierno municipal con el PSC. Matas y la concejala Katia Botta ya habían expresado discrepancias con la dirección local y habían anunciado que se tomarían unos días para valorar su posición política.
Con esta petición formal de revisión, Junts per Sabadell afirma querer reforzar el compromiso con la “pluralidad interna”, el respeto institucional y un funcionamiento orgánico que refleje realmente la voluntad de los afiliados. El grupo defiende que cualquier decisión de peso que afecte al futuro del partido en la ciudad debe contar con todas las garantías y con un proceso impecable.