El Ayuntamiento de Tortosa ha dado un paso adelante para modernizar su red de equipamientos deportivos y ha presentado dos proyectos al plan de mejora de instalaciones deportivas 2025-2029 que impulsa la Generalitat. Las propuestas se centran en dos espacios clave de la ciudad: por un lado, el campo polideportivo del Estadio Municipal Josep Otero y, por otro, el pabellón polideportivo Jordi Angelats.
El alcalde, Jordi Jordan, ha remarcado la urgencia de estas intervenciones porque, tal como ha subrayado, “La mejora de las instalaciones deportivas de la ciudad es una necesidad, ya que se trata de equipamientos donde hay que actuar para garantizar la calidad, la seguridad, la accesibilidad, la eficiencia y la sostenibilidad”.
En el campo polideportivo del Estadio Municipal Josep Otero, el proyecto prevé reforzar e impermeabilizar la estructura del graderío y la cubierta para evitar filtraciones de agua, así como renovar las redes de distribución de las instalaciones y adecuar los espacios destinados a almacén de material deportivo. También se realizará una reforma integral de los vestuarios. La inversión prevista es de 262.614 euros, de los cuales el 70 % se financiará con la subvención autonómica.
En cuanto al pabellón polideportivo Jordi Angelats, la actuación se centra en dos líneas principales: mejorar la accesibilidad tanto en la entrada desde la calle Alcanyís como en los vestuarios, y sustituir la actual cubierta de fibrocemento con amianto por una nueva y segura. Este proyecto está presupuestado en 628.814 euros, también con un 70 % de financiación a cargo del plan de la Generalitat. Recientemente, en este mismo equipamiento, ya se había ampliado la pista deportiva retirando las vallas perimetrales.
En conjunto, el consistorio prevé una inversión global de 891.428 euros en los equipamientos del Estadio Municipal, de los cuales, de acuerdo con las bases del programa autonómico, Tortosa recibiría 624.000 euros en subvenciones.
Paralelamente, el Ayuntamiento ha iniciado la reparación del muro de la calle Alcañiz, que separa la vía pública del velódromo y que, con más de 50 años de antigüedad, presentaba deformaciones y riesgo de colapso a causa del paso del tiempo y de las raíces de los pinos cercanos. La obra, que consiste en el derribo parcial de la parte superior y la reconstrucción de los tramos más deteriorados, supone una inversión de 27.198 euros.
Además, en breve comenzarán las obras de mejora de los lavabos del pabellón de Remolins, una actuación largamente reclamada por los usuarios, con un coste de 25.996 euros, así como la reposición de un parterre exterior del mismo equipamiento, con una partida de unos 9.000 euros. Con este paquete de actuaciones, el gobierno municipal quiere continuar poniendo al día la red de instalaciones deportivas y reforzar su papel como espacios de convivencia, salud y actividad física para el conjunto de la ciudadanía.