Las lluvias torrenciales de este domingo por la noche provocaron momentos de pánico en Godall (Montsià), donde el barranco del pueblo se desbordó violentamente, inundando calles, casas y equipamientos municipales.
Una de las afectadas, Araceli Villalbí, ha explicado a la ACN que “en un segundo la riada entró dentro de casa, el agua llevaba mucha fuerza, era muy agresiva, y reventó las puertas”.
Villalbí tuvo que huir nadando con su perra mientras el agua llegaba “hasta el techo”. No pudo salvar nada: “Todo se ha perdido”, lamenta. Otros vecinos también vivieron situaciones límite, como los clientes de un bar que tuvieron que agujerear una pared para subir al piso de arriba, o una cuidadora que ayudó a una abuela a refugiarse en la planta superior.
“Ni los más ancianos del pueblo recuerdan haber visto nunca algo así. El barranco está canalizado, pero no pudo resistir y lo arrasó todo”, ha explicado Villalbí, que ahora dice vivir con miedo a que vuelva a pasar.
El Ayuntamiento, también afectado por la riada
El alcalde de Godall, Alexis Albiol, ha confirmado que los daños son muy graves y que aún se están evaluando. “El Ayuntamiento, la cooperativa y muchos bajos se han inundado; también se ha levantado el asfalto en varias calles e incluso en la carretera de acceso al pueblo”, ha detallado.
La Diputación de Tarragona está trabajando de forma urgente para reparar la vía con grava, mientras los vecinos, con la ayuda de los Bomberos, intentan limpiar y recuperar las calles afectadas.
Albiol ha pedido calma y solidaridad a los vecinos y ha agradecido “el esfuerzo colectivo” de los habitantes y de personas de fuera del municipio que han venido a ayudar. También ha reclamado ayudas económicas para los propietarios sin seguro, que podrían quedar desprotegidos ante los daños materiales.
Media hora de lluvia devastadora
Según el alcalde, la situación se precipitó en solo media hora, a partir de las 16.30 h, después de una mañana de lluvia constante. “En aquel momento bajó una gran cantidad de agua y barro por el barranco y lo arrasó todo”, ha explicado.
Este lunes, Godall trabaja para cuantificar los daños y restablecer la normalidad, con calles aún cubiertas de barro y numerosas viviendas dañadas. A pesar de la gravedad de los hechos, no hay que lamentar víctimas ni heridos.
