Piden "detener" el partido de baloncesto entre el Baxi Manresa y el Hapoel de Jerusalén

El encuentro ha sido declarado de alto riesgo por la Comisión contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia

ACN
10 de octubre de 2025 a las 13:57h
Actualizado: 10 de octubre de 2025 a las 14:14h

La campaña Boicot ICL y el grupo de animación del Bàsquet Manresa Zona Roja ha hecho un llamamiento público "a toda la ciudadanía" para "detener" el partido de la Eurocopa entre el Baxi Manresa y el Hapoel de Jerusalén que se celebrará el 15 de octubre a las cuatro de la tarde en el pabellón Nou Congost. Los aficionados del baloncesto Manresa subrayan que "no se puede separar deporte y política", y que "permitir" la presencia de un equipo israelí "significa blanquear el genocidio y la propaganda de un estado que vulnera los derechos humanos cada día". El encuentro ha sido declarado de alto riesgo por la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.

Los impulsores de la campaña de boicot recuerdan que el Parlamento de Cataluña aprobó una resolución que "reconoce el sionismo como una forma de racismo", hecho que consideran "incompatible con los valores que debería transmitir el deporte".

También subrayan que las movilizaciones de Manresa se enmarcan en un contexto más amplio de "rechazo social y deportivo", y destacan que la afición del Valencia Basket "ha anunciado protestas" contra el partido contra el Maccabi de Tel Aviv el mismo 15 de octubre, o que el FC Barcelona ha decidido "no ceder" el Palau Blaugrana al Hapoel para entrenarse. Además, peñas del Joventut de Badalona "también han expresado su rechazo a la visita de equipos israelíes al Olímpic".

Desde Boicot ICL se afirma que esta es "una herramienta de presión no violenta y legítima" para "forzar el fin del genocidio y la ocupación de Palestina", y se reclama "coherencia" a instituciones, clubes y aficiones. "No podemos hacer como si no pasara nada mientras en Gaza mueren miles de personas. El deporte debe estar al servicio de la vida y de la dignidad, no del blanqueo de un régimen de apartheid".

La convocatoria se inscribe dentro del movimiento internacional Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) creado en 2005 que promueve el aislamiento de Israel por "la ocupación y colonización de Palestina". A juicio de los convocantes a la llamada, "los equipos deportivos israelíes actúan como embajadores del Estado de Israel", y directivos del Hapoel "han expresado abiertamente el apoyo" a las operaciones militares israelíes.