El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha anunciado este martes que el Consejo de Ministros del próximo 26 de agosto aprobará la declaración de “zonas catastróficas", en los territorios del Estado que han sufrido con más dureza los incendios forestales de los últimos días.
Esta medida activará un paquete de ayudas económicas excepcionales y permitirá la movilización de recursos adicionales para la recuperación de las áreas devastadas. El decreto afectará a comarcas del norte y el este peninsular, así como a varios municipios del litoral mediterráneo y zonas del interior, algunas de ellas también afectadas por lluvias torrenciales e inundaciones recientes.
La decisión llega en uno de los veranos más graves en décadas en lo que respecta a los incendios forestales, con más de 380.000 hectáreas quemadas en todo el territorio estatal, según datos oficiales.
Visita a Jarilla: Institucionalidad y reproches en un escenario devastador
Sánchez hizo el anuncio desde el puesto de mando avanzado del incendio de Jarilla (Cáceres), considerado el más grave de la historia reciente de Extremadura, con más de 15.500 hectáreas quemadas y un perímetro superior a los 150 km. Durante la visita, le acompañaron el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la presidenta extremeña, María Guardiola.
“No esperaremos una tregua meteorológica para actuar. El Gobierno de España estará al lado de los territorios afectados, ahora en la extinción y después en la reconstrucción,” afirmó Sánchez.
El presidente recordó que las competencias en materia de incendios son autonómicas, pero destacó que el sistema de protección civil estatal y la UME han estado a disposición de las comunidades desde el primer momento. En este sentido, ha apelado a la “lealtad institucional” y a la necesidad de cooperación entre gobiernos para hacer frente conjuntamente a la emergencia climática.
Respuesta autonómica: Entre la crítica y el reconocimiento
La presidenta de Extremadura, María Guardiola, que había acusado días atrás al Ejecutivo central de “retraso en el envío de medios”, moderó el tono durante la comparecencia conjunta con Sánchez. “Es cierto que no todos los medios que solicitamos el viernes llegaron a tiempo, pero también somos conscientes de que se ha hecho un gran esfuerzo. Agradecemos a todos los profesionales que trabajan sobre el terreno,” declaró.
Guardiola reconoció la llegada de refuerzos desde nueve comunidades autónomas, así como la colaboración internacional. Subrayó, además, la tarea coordinada a través del Cecopi (Centro de Coordinación Operativa Integrada).
Mientras tanto, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, mantenía la confrontación desde redes sociales, acusando al Gobierno de “improvisar y escatimar recursos” y criticando la falta de inversión en prevención y la ausencia de un mecanismo estatal permanente de respuesta.
Respuesta europea: Solidaridad internacional en marcha
La Unión Europea ha activado el mecanismo de protección civil para apoyar a España. Hasta siete países han aportado recursos aéreos y técnicos: Francia e Italia han enviado aviones cisterna, mientras que los Países Bajos, la República Checa y Eslovaquia han contribuido con helicópteros especializados.
Este dispositivo europeo se suma a los esfuerzos internos, con la participación de la UME, las brigadas forestales del Ministerio para la Transición Ecológica, la Guardia Civil, y equipos de emergencia procedentes de Andalucía, Cataluña, Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Aragón, Murcia y las Baleares.
¿Qué implica ser zona catastrófica?
La declaración de zona gravemente afectada por emergencias permite acceder a indemnizaciones para particulares que han perdido viviendas o bienes materiales, subvenciones y créditos blandos para negocios y explotaciones agrícolas afectadas, ayudas económicas a ayuntamientos para reparar infraestructuras públicas, beneficios fiscales para empresas y autónomos de la zona, refuerzo de los equipos de emergencia, si las condiciones de riesgo persisten, y planes de reforestación y recuperación ambiental de zonas especialmente vulnerables.
El Gobierno también contempla ayudas específicas para sectores como la agricultura, la ganadería o el turismo, que a menudo sufren graves pérdidas a raíz de los incendios.
Con la aprobación de la declaración la semana que viene, las administraciones locales y autonómicas podrán gestionar más ágilmente las solicitudes de ayuda, mientras que los afectados deberán acreditar los daños para acceder a las compensaciones.
El compromiso del Gobierno, según ha reiterado Pedro Sánchez, no se limita a la extinción del fuego, sino que incluye un plan integral de reconstrucción y prevención futura.
A medida que las llamas continúan activas en varios puntos del país, y con miles de personas evacuadas, el reto es mayúsculo. Pero también es una oportunidad, como ha defendido Sánchez, para transformar la política climática española y reforzar la capacidad de respuesta ante un fenómeno que "ya no es excepcional, sino recurrente".