El presidente de Junts, Carles Puigdemont, ha pedido "incorporar al conjunto del pueblo de Cataluña en una movilización por su libertad" sin tener en cuenta procedencias ni creencias. "No mirar a quién tenemos al lado, qué piensa, ni qué lengua habla, ni qué origen tiene, ni qué religión profesa, sino integrar", ha asegurado, durante el acto que el partido ha hecho en Cornellà del Terri (Pla de l'Estany) para conmemorar el octavo aniversario del 1-O. El secretario general de Junts, Jordi Turull, ha afirmado que "no se trata de volver" a hacer un referéndum, sino "de terminar el trabajo". Turull ha hecho un llamamiento a la unión del independentismo, dejando de lado "reproches" y evitando que "haga más agujero" la estrategia "de intentar anestesiar el país".
Junts per Catalunya ha escogido esta noche Cornellà del Terri para conmemorar el octavo aniversario del referéndum. Lo ha hecho, precisamente, en el pueblo donde el expresidente Carles Puigdemont votó aquel 1 de octubre de 2017, después de que el despliegue policial le impidiera hacerlo en el pabellón de Sant Julià de Ramis (Gironès), donde inicialmente preveía depositar la papeleta en la urna.
El presidente de Junts, que ha intervenido por videoconferencia, ha asegurado que el 1-O fue "el día de una gran victoria", tanto de las "instituciones" como de la "movilización ciudadana" ante los embates y la "represión" del Estado para impedir el referéndum. Carles Puigdemont ha recordado que la votación se llevó a cabo, a pesar de "los miles de policías desplegados, la campaña de derechas y de izquierdas para evitar que Cataluña pudiera votar y todo el peso de las instituciones del Estado".
"Fue un referéndum, lo ganamos y de aquí llora la criatura; porque de aquella nuestra victoria, ellos continúan movilizados y no han abandonado la trinchera", ha asegurado el presidente de Junts. Puigdemont ha asegurado que el estado español, "desde fuera de Cataluña, desde dentro de Cataluña, y ahora también en las instituciones catalanas" -en referencia al Govern del PSC- "trabaja para que no podamos alcanzar las condiciones suficientes para ser una nación libre al lado de las otras del mundo".
"Unidad, transversalidad y futuro"
Y aquí, el expresidente de la Generalitat ha subrayado no renunciarán a "este derecho". Pero también ha subrayado que el trabajo que se debe hacer es "colectivo" y que la fórmula para alcanzar la independencia -a imagen de la que permitió el referéndum- se basa en la "unidad" pero también en "la transversalidad". "No mirar a quién tenemos al lado, qué piensa, ni qué lengua habla, ni qué origen tiene, ni qué religión profesa", ha afirmado Puigdemont, pidiendo "integrar e incorporar al conjunto del pueblo de Cataluña en una movilización por su libertad".
El presidente de Junts ha asegurado que la independencia permitirá "asegurar el futuro de la nación, de nuestra lengua, de poder crear cohesión social y garantizar derechos fundamentales a toda la gente que vive y trabaja en Cataluña". Cosas, ha asegurado, que "España no puede garantizar". "El 1 de octubre ha entrado por méritos propios en la historia de Cataluña; cuidémoslo, reivindiquémoslo y, sobre todo, hagámoslo con la mirada pensando en el futuro, porque eso sólo depende de nosotros", ha concluido.
"El adversario no es otro independentista"
Durante el acto, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha advertido que ocho años después "la represión no ha finalizado" y ha recordado que todavía hay Puigdemont y los exconsellers Lluís Puig y Toni Comín en el exilio: "La cúpula judicial contra los independentistas no tiene jueces, sino justicieros". Sin embargo, ha afirmado que la conmemoración del referéndum debe servir para hacer una renovación del compromiso "para terminar aquello que votamos, la independencia de Cataluña". "No se trata de volverlo a hacer, sino de acabarlo", ha añadido.
"Es verdad, no terminamos el trabajo, pero que no termináramos la primera vez no quiere decir que abandonemos", ha dicho el secretario general que ha subrayado que Cataluña es el país "del santo volvamos". Por eso, ha reclamado recuperar la unidad del independentismo. "No dejemos que haga más agujero la estrategia del Estado y de algunos de aquí de intentar anestesiar el país, no hagamos caso a los discursos de los profetas del desánimo ni a los reproches entre independentistas, no caigamos en trampas", ha remarcado.
Turull ha defendido que un independentista "por diferente que piense, nunca es el adversario": "El adversario no es otro independentista, sino el Estado que nos reprime y lo hace todo para detener lo que no debe ser un camino sin salida, sino un camino sin retorno".
El papel del municipalismo
El acto, que se ha hecho en la plaza de la Iglesia, ha empezado con la bienvenida del alcalde de la población y presidente de la AMI, Salvador Coll, que ha reivindicado el papel del municipalismo para revertir el "desencanto actual", que atribuye a "la política espectáculo, la fragmentación y la pérdida de unidad". "Lo tenemos que transformar en fuerza", ha dicho.
Por eso, ha pedido huir de partidos que "prometen milagros": "Ninguna nación se ha construido desde la rabia y el repliegue, y menos con soluciones exprés. No es con magia, se hace con instituciones municipalistas y de país fuertes y valientes". "No nos dobleguemos nunca por togas, sentencias ni tribunales de Madrid", ha concluido.
La conmemoración ha continuado con una mesa redonda de personas implicadas en el referéndum que han reflexionado sobre la vigencia del 1-O y han compartido recuerdos sobre la jornada. Han participado la diputada de Junts y exalcaldesa de Girona, Marta Madrenas; la diputada de Junts pel Sí en 2017 y actual alcaldesa de Maçanet de la Selva, Natàlia Figueras; el alcalde de Molló, Pep Coma y un miembro de la mesa de votación de Cornellà donde acabó depositando la papeleta en la urna Puigdemont.
