La ola de calor que ha afectado a Cataluña durante dos semanas y que ha dejado récords en varios puntos del territorio también pasará a la historia por la muerte de 180 personas relacionadas con las altas temperaturas de estos días. Según el Instituto de Salud Carlos III, desde el inicio del verano habrían muerto 490 personas en Cataluña por este motivo, y 40 de estas defunciones se produjeron en un único día: domingo, 17 de agosto.
Además, el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) de Cataluña atendió más de 400 llamadas durante la ola de calor relacionadas con las altas temperaturas y sus efectos en las personas. Un tercio de las llamadas provenían de personas mayores de 65 años, uno de los colectivos más vulnerables a las temperaturas extremas y que aglutina los principales esfuerzos de las administraciones a la hora de planificar políticas y acciones públicas de protección por el calor.
En toda España, la ola de calor dejó, según el Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), un exceso de 1.149 muertes en los 16 días que duró. Cabe destacar, sin embargo, que la mayoría de las muertes no se produjeron por un efecto directo del calor, como por ejemplo con un golpe de calor, sino que se produjeron por los efectos del calor sobre enfermedades o condiciones previas y que dificultaban un cuadro médico que ya era complicado.
Antes de esta ola de calor, hasta finales de julio ya se habían producido en Cataluña 306 muertes atribuibles a los efectos del calor, principalmente entre junio y principios de julio.