Telefónica ha puesto sobre la mesa una rebaja del 10% en el número de trabajadores incluidos en el ERE anunciado a finales de noviembre, pero la propuesta continúa lejos de lo que exigen los sindicatos. Según ha denunciado UGT en un comunicado, esta reducción es “insuficiente” para garantizar un acuerdo “equilibrado” y una salida que preserve la salud laboral y la sostenibilidad de las plantillas. El expediente afecta inicialmente a 6.088 empleados, y la compañía de telecomunicaciones pretende aplicarlo a Telefónica SA, Telefónica Global Solutions y Telefónica Innovación Digital.
En la quinta reunión de la Comisión Negociadora, Telefónica ha ofrecido una reducción adicional del 5%, que se suma al 5% anunciado previamente. En términos prácticos, esto dejaría 126 afectados en Global Solutions, 210 en Innovación Digital y 340 en Telefónica SA. Aunque UGT reconoce que se trata de un paso adelante, insiste en que es necesaria una rebaja más contundente para evitar una sobrecarga de trabajo que, según advierten, ya es palpable en diversas áreas.
En cuanto a la voluntariedad, uno de los puntos clave de la negociación, la empresa ha aceptado abrir la adhesión en áreas consideradas críticas, aunque solo para los casos de prejubilación. Además, amplía el acceso a las salidas por edad a las personas nacidas en 1971, añadiendo así una nueva franja generacional a la que ya integraban los nacidos en 1970 y anteriores. UGT exige que cualquier trabajador que quiera acogerse voluntariamente pueda hacerlo y defiende que la prejubilación sea “el mecanismo central” del ajuste, para evitar despidos secos
En el ámbito económico, Telefónica ha planteado una nueva tabla de rentas con tramos de edad diferenciados y ha aceptado incrementar un 1% anual la base reguladora del segundo tramo. Para los trabajadores que no tengan acceso a prejubilación, la compañía propone indemnizaciones de 47/36 días por año trabajado, hasta un máximo de 36 mensualidades. También incluye primas de voluntariedad ligadas a la antigüedad, que oscilan entre los 2.500 y los 9.000 euros.
Aun así, UGT considera que estas concesiones siguen siendo insuficientes. El sindicato reclama más días de indemnización por año trabajado, topes más elevados y primas más atractivas, con el objetivo de incentivar la adhesión voluntaria y asegurar compensaciones “justas y dignas”.
La negociación continuará en los próximos días, con un clima tenso y todavía lejos de un acuerdo definitivo
