Miles de personas han salido este jueves a las calles en toda Catalunya para denunciar el asalto del ejército israelí a la Global Sumud Flotilla. Los organizadores de la Flotilla habían convocado concentraciones para este jueves a las 19.00 horas en todos los municipios.
Por su parte, el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC) ha convocado para el viernes otra huelga estudiantil para protestar por la intercepción de la Flotilla por parte de Israel. El sindicato anima a secundar la jornada de lucha de este jueves y a seguir la huelga del viernes para forzar a las instituciones universitarias a romper lazos con Israel.
Quien también ha convocado huelga para el viernes es la CGT de Enseñanza para el personal docente de centros educativos públicos, universidades y sector del ocio. La huelga, convocada desde hace días por el sindicato, se hará efectiva este viernes después de que el ejército de Israel haya asaltado la Global Sumud Flotilla. El sindicato también reclama el fin de las relaciones institucionales y académicas con el estado de Israel. Fuentes sindicales denuncian que el Departamento de Educación ha llevado a cabo injerencias e impedimentos para evitar la movilización en los centros educativos y exigen una rectificación por parte de la consejería encabezada por la socialista Esther Niubó.
Cabe recordar que para el sábado día 4 también ya estaban convocadas diversas manifestaciones en favor de Palestina. Además, la federación sindical IAC ha convocado una huelga general de 24 horas para el miércoles 15 de octubre. Justamente, el sindicato tiene a tres activistas a bordo de la Flotilla y denuncia la "complicidad" de los gobiernos y las instituciones europeas", que mantienen relaciones diplomáticas, comerciales y militares con Israel.
En Barcelona, 15.000 personas según el Ayuntamiento se han manifestado por la tarde para protestar contra la operación. Los participantes han intentado acceder desde Drassanes a la ronda Litoral, pero un fuerte dispositivo de los Mossos d'Esquadra lo ha impedido, con algunas cargas en los momentos de más tensión. Los manifestantes han lanzado pintura y bengalas a los agentes, y posteriormente parte de la acción se ha trasladado a la explanada delante del World Trade Center. Allí, varios activistas se han subido a la Torre de Jaume I y han desplegado una pancarta donde se podía leer “Torre Palestina”.
En Tarragona, medio millar de personas se han concentrado en la plaza de la Font con una gran bandera palestina para denunciar el asalto a la Flotilla. El acto, convocado por la Comunidad Palestina Árabe Unida y la Plataforma Unitaria del Camp de Tarragona Solidaridad con el Pueblo Palestino, ha contado con consignas contra el genocidio en Gaza. “La causa palestina es una causa humana, el pueblo palestino está sufriendo un genocidio, una matanza indiscriminada. Creo que como ser humano, dejando de lado lo que es la política, tenemos que parar esto”, ha expresado Saleh Shaqadan, representante del movimiento. Los concentrados se han citado de nuevo este sábado en la marcha de cacerolas por Palestina.
En Lleida, un millar de personas según fuentes policiales han salido en manifestación desde la plaza Víctor Siurana, frente al Rectorado de la UdL, hasta la subdelegación del gobierno español. La marcha, que ha transcurrido sin incidentes, ha recorrido la rambla de Aragón y el Eje Comercial, con banderas palestinas, pancartas con mensajes contra Israel y pañuelos palestinos. Los participantes no han dejado de gritar consignas contra el genocidio y a favor de la libertad de Palestina.
En Girona, más de 1.500 personas se han concentrado en la plaza del Vi para reclamar la liberación de los activistas de la Flotilla y condenar el “genocidio que Israel perpetra en la Franja de Gaza”. El alcalde, Lluc Salellas, se ha añadido a la protesta y ha reclamado que las “instituciones internacionales actúen para detener la impunidad de Israel”. La movilización ha continuado por el centro hasta la avenida Josep Tarradellas, donde algunos manifestantes han ensuciado con pintura roja los cristales de un establecimiento McDonald’s y han dañado mobiliario urbano.