Más de 1.500 personas se han concentrado este jueves por la noche en la plaza del Vi de Girona para reclamar la liberación de los activistas de la Global Sumud Flotilla. Los manifestantes han condenado el "genocidio que Israel perpetra en la Franja de Gaza". El alcalde de Girona, Lluc Salellas, se ha añadido a la protesta y ha reclamado que las "instituciones internacionales actúen para detener la impunidad de Israel".
Los manifestantes han continuado la movilización por el centro de Girona, y se han dirigido hasta el McDonalds de la avenida Josep Tarradellas al grito de "Boicot a Israel" y "Viva Palestina libre". Algunos de los participantes han dañado mobiliario y han ensuciado de pintura roja los cristales del establecimiento.
