Julio de 2025 ha sido uno de los más lluviosos de los últimos 100 años, comparable a los de 1977, 1960 y 1943, y sólo superado claramente por el de 1932. Según datos del Servei Meteorològic de Catalunya (SMC), las acumulaciones de lluvia han multiplicado por dos, tres o incluso por cuatro la escasa media climática del mes de julio en gran parte del país.
El contraste con la temperatura también ha sido destacable: después de un junio excepcionalmente cálido, el mes de julio ha roto esta inercia térmica y ha terminado con registros más habituales para la época en el conjunto. En algunos puntos del Prepirineo y la Cataluña Central, incluso, la temperatura media ha sido más fresca de lo habitual, con valores que no se veían desde 2014.
El Servei Meteorològic de Catalunya ha explicado que aunque los principales episodios de lluvia se concentraron en pocas jornadas, fueron suficientes para superar ampliamente la media mensual en muchos lugares.
Por un lado, los días 5 y 6 de julio la lluvia fue especialmente intensa en puntos del noreste, destacando los 123,2 mm que se acumularon en Anglès (la Selva). Además, el 12 de julio, el paso de una pequeña Dana provocó la formación de tormentas excepcionalmente extensas e intensas, con acumulaciones de precipitación incluso superiores a los 100 mm en algunos puntos del prelitoral. Poco después, los días 23 y 24, la lluvia fue nuevamente extensa y superó los 50 mm en sectores de la Cataluña Central. Por último, el día 25 una tormenta acompañada de piedra y ventoleras fuertes dejó hasta 55,7 mm en Teià (el Maresme).
El Meteocat ha señalado que las precipitaciones fueron “irregulares” pero ha dicho que el impacto de los episodios fue “generalizado”. Así, ha afirmado que todo ello dio lugar a un julio “extremadamente lluvioso” en el conjunto de Cataluña, especialmente en puntos de la Cataluña Central y del prelitoral, donde ha terminado siendo “el más lluvioso desde 1950”.
Aleix Serra, jefe del Equipo de Control de Calidad de Datos del Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat), ha apuntado que la situación de este julio es “muy poco frecuente, ya que, fuera del Pirineo, “este suele ser el mes que climáticamente tiene una lluvia más escasa”. En este sentido, una de las únicas zonas donde la tendencia habitual se ha mantenido y no se han vivido lluvias intensas ha sido la del Pirineo occidental, donde el mes ha sido seco o claramente por debajo de lo que sería habitual.
El julio más fresco desde 2014 en la Cataluña Central y sectores del Prepirineo
En cuanto a las temperaturas, el mes arrancó cálido, siguiendo con la tónica de junio que fue muy caluroso. Con todo, la irrupción de sucesivas masas de aire más fresco ha terminado dejando un balance de julio cálido cerca de la costa (con anomalías de entre +1 y +2 °C), pero notablemente menos cálido o incluso fresco en el interior y en las áreas de montaña. “En sectores del Prepirineo y del norte de la Cataluña Central ha sido el julio más fresco desde 2014, con valores incluso por debajo de la media climática”, ha comentado Anna Rius, jefa de Servicios Climáticos.
En conjunto, hay zonas donde el mes de junio fue más cálido que julio, especialmente en áreas de montaña y del interior, un hecho inusual en el patrón climático habitual. En cambio, en buena parte de la costa julio ha sido ligeramente más cálido, probablemente por la inercia térmica del mar.