Uno de los glaciares más emblemáticos del planeta, el Perito Moreno, podría estar a punto de iniciar un retroceso acelerado de varios kilómetros, según alerta un reciente estudio publicado por la Universidad de Erlangen-Nuremberg. El trabajo científico, que combina datos de radar, satélites y mapeo submarino, apunta a que el glaciar argentino está perdiendo grosor y estabilidad a una velocidad inédita hasta ahora.
Los investigadores han identificado una cresta rocosa situada en el fondo del lago donde desemboca la lengua de hielo, una especie de soporte natural que ha sido, hasta ahora, clave para su estabilidad. Pero esta situación podría cambiar pronto.
“Es muy probable que se observe un retroceso a gran escala, de varios kilómetros”, asegura Moritz Koch, coautor del estudio.
Los resultados muestran que el grosor del Perito Moreno se ha ido adelgazando de manera acelerada: si entre 2000 y 2019 el deshielo era de 34 centímetros anuales, desde 2019 la media ha pasado a ser de 5,5 metros por año, una pérdida dieciséis veces mayor.
Un glaciar icónico en peligro
Situada al sur de Argentina y reconocida por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad desde 1981, el Perito Moreno ha sido durante décadas una excepción entre los glaciares patagónicos, manteniéndose casi estable mientras otros retrocedían rápidamente. Entre 2000 y 2019, su retroceso fue inferior a los 100 metros. Pero desde 2019, los científicos han detectado una pérdida de más de 800 metros en algunas zonas.
Lo que preocupa especialmente a los expertos es que, si el glaciar se desprende completamente de la cresta que lo sujeta, su retroceso podría acelerarse drásticamente. El agua más profunda del lago favorecería la aparición de icebergs y el debilitamiento estructural de la lengua glacial.
Aunque el Perito Moreno ha sido considerado durante años como un ejemplo de resiliencia ante el cambio climático, los nuevos datos muestran que incluso los glaciares más estables podrían estar a punto de cambiar de comportamiento.
