Camilla, una niña que se empapó accidentalmente una pila, murió con solo 17 meses. Los detalles de qué pasó se aclararán mejor cuándo se le practicará la autopsia. La pequeña fue ingresada primero en el hospital Le Scotte de Siena, en el norte de Italia (dos veces) y luego fue trasladada con la máxima urgencia a Massa, donde murió.
Según lo que se desprende, la Camilla había ingerido una pila de botón. Esto le habría provocado vómitos, por lo que los padres la llevaron por primera vez al hospital de Siena.
Tras unas horas de observación, la pequeña recibió el alta, para volver a ser hospitalizada poco después, de nuevo en Siena. Esta segunda vez se identificó la causa de los síntomas que presentaba la niña: la batería ingerida.
En ese momento la pequeña fue trasladada de urgencia a Massa, donde va al poco de llegar.
LOS PADRES PIDEN JUSTICIA
Ahora los padres piden justicia y la fiscalía de Apuan ha abierto una investigación, encargada a los cargueros. Las historias clínicas de los dos hospitales ya se han facilitado y próximamente se designará un abogado para proteger los intereses de la familia.
“No podemos prescindir de lo que pasó durante la primera visita que se comprobará por las investigaciones, y que genera dudas con relación a la circunstancia de que el menor fue dado de alta y luego recurrió a la ayuda de los sanitarios al cabo de unas horas”. afirmó Vincenzo Bonomei, abogado de los padres de la menor.
Camilla, hija de una pareja joven originaria de la República Dominicana, pero residente en la zona de Siena desde hacía tiempo, fue trasladada el martes 5 de noviembre a la sala de urgencias del policlínico Le Scotte de Siena porque se sintió mal y recibió el alta al cabo de 10 horas.
Cuatro horas después de volver a casa, la pequeña sufrió una recaída y regresó al hospital con una segunda hospitalización, esta vez, a cuidados intensivos.
Según lo que sabemos, la causa de la primera hospitalización fue la ingestión de una pila, de la que los padres no se dieron cuenta, y por lo tanto no lo explicaron a los médicos.
Entonces, la batería habría sido identificada y retirada durante la segunda hospitalización en Siena, pero las sustancias químicas liberadas habrían causado daños irreversibles a la pequeña.
Seguidamente, el martes 12 de noviembre, el traslado a Massa donde el quirófano había sido alertado de operación cardíaca pero ni siquiera habría habido tiempo para que la pequeña fuera intervenida.
De hecho, habría muerto tan pronto como llegó al hospital de Massa, y a partir de ahí se inició oficialmente la investigación.
LAS SUSTANCIAS LIBERADAS DAÑARON LA AORTA
“Se siguieron todos los protocolos previstos en estos casos, pero el estado de la pequeña empeoró posteriormente, probablemente por las sustancias liberadas de la batería que luego tuvieron un efecto nocivo sobre la aorta”, leemos en una nota conjunta firmada por los médicos de los dos hospitales.
La Fiscalía de Massa Carrara habría abierto un caso de homicidio involuntario. Es presumible que el expediente se trasladará pronto a Siena.