Tarragona recibió el lunes el agua de Sant Magí de la Brufaganya, un ritual cargado de simbolismo que abre los actos en honor al patrón de la ciudad. El Día del Agua de Sant Magí 2025 en Tarragona, sin embargo, dejó una imagen inesperada. En pleno séquito, uno de los jinetes que participaban en el desfile cayó del caballo ante la mirada del público, debido a un resbalón del animal. A pesar del susto, el protagonista se levantó con rapidez y reanudó la marcha. La escena arrancó una fuerte ovación y se ha convertido en una de las anécdotas más comentadas de la fiesta.
El incidente no disminuyó el espíritu festivo de una jornada que mezcla devoción, tradición y espectáculo. El día grande se completó con una diada castellera histórica, que llenó la plaza de toros de euforia, y con la solemne procesión de la tarde, que puso punto final a una celebración intensa y emotiva.
Con el adiós a Sant Magí, Tarragona ya se prepara para su otra gran fiesta: Santa Tecla, en septiembre, que volverá a llenar las calles de cultura popular, música y devoción.