Tarragona ha dado un paso clave en su modelo turístico con la obtención de la **certificación Biosphere**, un distintivo internacional que avala su apuesta por un desarrollo alineado con los **Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)** de las Naciones Unidas. Con este reconocimiento, la ciudad se integra en la red global de destinos comprometidos con un **turismo responsable y regenerativo**.
El nuevo sello consolida Tarragona como uno de los destinos de referencia en Cataluña en cuanto a sostenibilidad y refuerza un modelo equilibrado, respetuoso con el entorno y coherente con los valores sociales, culturales y ambientales del territorio. El municipio, con un patrimonio bimilenario reconocido por la UNESCO, avanza así hacia una estrategia turística de largo recorrido que quiere garantizar un impacto positivo tanto para los visitantes como para la comunidad local.
Una auditoría externa que valida la hoja de ruta
La obtención del distintivo Biosphere Certified ha sido posible tras una auditoría exhaustiva que ha analizado las prácticas de gobernanza, medio ambiente, economía circular, inclusión social y calidad turística. El sello, otorgado por el Instituto de Turismo Responsable (RTI), permite monitorizar y mejorar de forma continua los indicadores que marcarán la evolución del destino
El proyecto se enmarca en el modelo “Tarragona, entre azul y verde”, impulsado por el Ayuntamiento y reforzado por el Plan de Sostenibilidad Turística en Destino, financiado por los Fondos Europeos Next Generation. Esta estrategia apuesta por la transición verde y digital, la eficiencia energética y la competitividad, con la mirada puesta en un futuro más sostenible.
La consejera de Turismo, Promoción Económica y Comercio, Montse Adan, señala que este paso “es esencial para el turismo que queremos para Tarragona; un turismo sostenible, con valores sociales y ambientales respetuosos con nuestro territorio”.
Conectada a los 17 ODS y a una red global
Gracias a la metodología Biosphere, la ciudad ha podido vincular sus iniciativas a los 17 ODS, generando datos e indicadores que permiten medir el impacto real en ámbitos sociales, culturales, económicos y medioambientales. Con este proceso, Tarragona pasa a formar parte de una comunidad internacional de destinos que trabajan bajo criterios de transparencia y mejora continua.
Desde Biosphere se ha reconocido la labor del equipo técnico municipal y de todas las instituciones que han contribuido a alcanzar el distintivo. Más allá de su legado romano Patrimonio de la Humanidad, Tarragona proyecta hoy una identidad que combina cultura, gastronomía, mar y naturaleza, y que invita a ser descubierta con una mirada pausada y responsable.
El reconocimiento también quiere animar a otros territorios a seguir este camino hacia un modelo turístico que pone en el centro a las personas, la biodiversidad y el patrimonio cultural.
