El Ayuntamiento ha presentado en la comisión informativa de Hacienda de esta mañana la propuesta de congelar los principales impuestos y tasas municipales para el año que viene, al tiempo que introduce mejoras en las bonificaciones ambientales y sociales. El objetivo es dar estabilidad económica a los hogares, incentivar prácticas sostenibles y asegurar que las ayudas lleguen a quien más las necesita.
La consejera de Hacienda, Isabel Mascaró, ha destacado que “la congelación de los tributos es una decisión clara para dar respiro a las familias y empresas del municipio. En momentos como el actual, debemos actuar con responsabilidad y garantizar que la fiscalidad sea una herramienta para ayudar, no para dificultar”.
Más bonificaciones ambientales para fomentar la sostenibilidad
Entre las principales novedades está la reducción de la tasa de residuos por uso del punto limpio móvil. Esta bonificación, que hasta ahora solo se aplicaba al punto limpio fijo, se amplía para reconocer también el compromiso de los usuarios que utilizan el punto limpio móvil y para incentivar su uso entre el resto de ciudadanos.
Esta medida quiere fomentar la correcta gestión de los residuos y promover hábitos más sostenibles, en coherencia con los compromisos municipales en materia de transición ecológica.
Cambios en la tarifa social para llegar a más familias
El Ayuntamiento también ha aprobado una modificación de los criterios de acceso a la tarifa social, con la finalidad de simplificar su gestión y ampliar su alcance.
A partir de ahora, todas las familias numerosas que ya reciben la bonificación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) podrán acceder directamente a la tarifa social sin tener que presentar documentación adicional.
Esta modificación permitirá que hasta 691 familias del municipio se puedan beneficiar del apoyo económico, mientras que el año pasado no superaban las 40. “Hemos revisado los criterios para hacerlos más justos y realistas. Queremos que ninguna familia que cumpla las condiciones quede fuera por cuestiones administrativas. Simplificar procesos y ampliar el alcance de la tarifa social es una manera muy directa de apoyar a la ciudadanía”, ha explicado Mascaró.
Límite de valor catastral para garantizar una fiscalidad más justa
Para asegurar una gestión más equitativa de los recursos públicos, solo podrán beneficiarse de esta reducción las familias numerosas con viviendas que no superen los 100.000 euros de valor catastral. Los hogares que superen este valor quedarán excluidos de la tarifa social.
Según la consejera, “esta medida nos permite dirigir los recursos públicos de manera más eficiente y asegurar que lleguen a las familias que realmente necesitan este apoyo”.
Compromiso con una fiscalidad justa y sostenible
Con este conjunto de medidas, el Ayuntamiento reafirma su compromiso con una política fiscal más justa, social y sostenible, que prioriza el apoyo a las familias, fomenta la sostenibilidad y actúa con prudencia en la gestión de los recursos municipales.
“Congelar impuestos, ampliar bonificaciones y revisar criterios son decisiones que tienen un impacto real en la vida cotidiana de las personas. Apostamos por una fiscalidad que sea una aliada, no un obstáculo”, ha concluido Mascaró.