El Ayuntamiento de Reus ha conmemorado este martes, 25 de noviembre, el Día Internacional para la Erradicación de la Violencia hacia las Mujeres con un acto institucional presidido por la alcaldesa Sandra Guaita. La ceremonia ha comenzado con un minuto de silencio en recuerdo de las 38 mujeres asesinadas por violencia machista en el Estado español desde el inicio de 2025. La concejala de Servicios a las Personas y Derechos Sociales, Anabel Martínez Serrano, ha leído uno por uno sus nombres, recordando que, el año pasado, en el mismo período, las víctimas fueron 40.
Dos momentos han marcado especialmente la jornada. Por un lado, la lectura de la Declaración institucional, que ha corrido a cargo de Mònica Dalmau Vidal, superviviente de violencia machista, aportando una voz directa y conmovedora sobre la necesidad de avanzar en la lucha contra todas las formas de agresión. Por otro lado, la actuación de Paula Fitzz, que ha interpretado la pieza “M’escullo a mi”, creada en el marco del proyecto Joves Referents d’Igualtat. La interpretación ha puesto de manifiesto cómo el arte puede devenir una herramienta poderosa de sensibilización y transformación social.
El acto se enmarca en un conjunto de acciones más amplio. Durante la semana pasada y la actual, el Ámbito de Igualdad del Casal de les Dones ha organizado numerosas actividades para informar, concienciar y dar visibilidad a los servicios municipales de atención a las mujeres, reforzando el trabajo comunitario que se lleva a cabo en la ciudad.
La violencia digital, en el centro de la Declaración institucional
La Declaración institucional del 25 de noviembre de 2025 denuncia la persistencia de la violencia machista y pone el foco en su dimensión digital, una realidad creciente y a menudo invisibilizada. El texto recuerda que la Ley 17/2020 ya reconoce explícitamente esta tipología de violencia, que afecta a mujeres de todas las edades, pero especialmente a jóvenes y adolescentes. El entorno digital, marcado por una regulación limitada y una evolución constante, amplifica desigualdades estructurales y reproduce dinámicas de control, intimidación y agresión que vulneran derechos fundamentales.
Entre las formas más frecuentes de violencia digital, la Declaración destaca el ciberacoso, la geolocalización, la violación de la privacidad, el acceso no consentido a dispositivos y cuentas personales, la captación en nuevas formas de explotación sexual digital y los insultos machistas dirigidos a mujeres con proyección pública —políticas, periodistas, activistas o creadoras de contenido—.
Los datos internacionales expuestos son contundentes: según la ONU, más del 73% de las mujeres del mundo han sufrido violencia en línea y el 90% de las víctimas de difusión no consentida de imágenes íntimas son mujeres. A escala estatal, los estudios indican que el 74% de las víctimas son jóvenes menores de 24 años.
La campaña institucional del 25N impulsada por el Departamento de Igualdad y Feminismos, bajo el lema “Si parece violencia machista, es violencia machista”, también pone el foco en esta realidad, que continúa creciendo y afectando especialmente a las mujeres jóvenes.
Un día para recordar y reivindicar
El 25 de noviembre es una fecha cargada de simbolismo. Conmemora el asesinato de las hermanas Mirabal en la República Dominicana en 1960, activistas políticas convertidas en iconos de resistencia. El movimiento feminista centroamericano comenzó a reivindicar su memoria en 1981 y, en 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas oficializó la jornada como Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
Desde entonces, miles de ciudades en todo el mundo, como Reus, se detienen para denunciar una violencia arraigada en la discriminación y la falta de equidad, y para reafirmar el compromiso colectivo en su erradicación.
