Port Tarragona y el Ayuntamiento de Torredembarra han renovado el convenio de colaboración para ofrecer visitas guiadas al Faro de la localidad. Este viernes, 7 de noviembre, se ha oficializado la reedición del acuerdo a los pies del Faro. El convenio, que se firmó por primera vez en 2015 y se ha ido renovando a lo largo de los años, permite que el Ayuntamiento, mediante la Concejalía de Turismo y Comercio,organice visitas programadas al equipamiento, que es propiedad de la Autoridad Portuaria de Tarragona. Desde el inicio de la colaboración, hace ahora 10 años, más de 18.000 personas han visitado el Faro de Torredembarra, conocido por ser el más alto y el más joven de Cataluña.
La voluntad de ambas instituciones, formalizada con la renovación del convenio, es que la ciudadanía pueda disfrutar de esta instalación de señalización marítima situada en la llamada Punta de la Galera, un lugar de alto interés paisajístico del litoral torrense. En este sentido, cabe destacar que la colaboración se enmarca dentro del compromiso de la Autoridad Portuaria de Tarragona **para preservar y difundir el patrimonio marítimo y portuario del territorio**.
El primer convenio se firmó el 28 de abril de 2015 y las primeras visitas se llevaron a cabo el 19 de junio del mismo año. A lo largo de los años, el acuerdo se ha ido renovando, lo que ha permitido que cada año el Faro haya podido abrir sus puertas y acoger visitas guiadas. La reedición del convenio alarga la colaboración entre el APT y el Ayuntamiento durante cuatro años más.
Divulgar el patrimonio marítimo
“La renovación de este convenio es una muestra del buen trabajo conjunto entre la Autoridad Portuaria de Tarragona y el Ayuntamiento de Torredembarra. Mantenerlo abierto a la ciudadanía permite poner en valor nuestro patrimonio y reforzar el atractivo turístico y cultural de la Torre”, ha asegurado el alcalde del municipio, Vale Pino, durante el acto de firma y posterior visita al equipamiento.
Por su parte, el presidente de Port Tarragona, Santiago J. Castellà, ha reafirmado el compromiso de la APT a la hora de dar a conocer el legado marítimo portuario del territorio. “Con la renovación de este acuerdo, continuamos nuestra labor de divulgación del mundo marítimo y, además, lo hacemos con la colaboración y la complicidad del Ayuntamiento, que ha convertido esta construcción emblemática en un referente turístico y paisajístico de Torredembarra”.
El acto ha contado también con la participación de la concejala de turismo del Ayuntamiento de Torredembarra, Jovita Baltasar, y los técnicos de señales marítimas, que han explicado el funcionamiento del faro.
Llegar al visitante 20.000, el hito para 2026
A lo largo de estos 10 años de visitas, el Faro de Torredembarra ha acogido a 18.460 visitantes (datos hasta septiembre de 2025). En el verano de 2019, se alcanzó un hito importante con el visitante número 10.000 del equipamiento. En los últimos cinco años, ha habido una media de cerca de 1.500 visitantes al año. Este año, hasta el mes de septiembre, 1.134 personas han pasado por el Faro en alguna de las actividades programadas.
La Concejalía de Turismo y Comercio se marca como hito para 2026 **llegar a los 20.000 visitantes**. Cabe destacar que las particularidades del espacio hacen que el acceso al interior del Faro se hagan en grupos de máximo siete personas. **El precio de la visita es de 3 euros** (1,50 para colectivos con entrada reducida).
El faro más joven y más alto de Cataluña
El Faro de Torredembarra, obra del arquitecto Josep Llinàs i Carmona, surgió de la necesidad de cubrir una zona de oscuridad situada entre los faros de Salou y Vilanova i la Geltrú. Se encuentra ubicado en el acantilado más saliente del roquerío de Torredembarra conocido como la punta de la Galera. Su torre es la más alta de todos los faros de Cataluña: 38 m sobre el terreno y 58 m sobre el mar.
Se empezó a construir en enero de 1999 y se puso en funcionamiento el 1 de enero de 2000, a las 00 horas, coincidiendo con la entrada al nuevo milenio. Estas fechas otorgan un simbolismo especial al Faro, ya que pasará a la historia como el último faro construido en el siglo XX y en el segundo milenio, y el primero en ser inaugurado y encendido ya en el siglo XXI y en el tercer milenio.