El Morell ha vivido un fin de semana intenso y lleno de tradición con dos actividades que ya forman parte de su calendario anual: la 29ª Exposición de Setas, organizada por la entidad Tocats del Bolet, y el 18º Encuentro de Encajeras, impulsado por la Asociación de Encajeras del Morell, ambas con la colaboración del Ayuntamiento del Morell. Dos propuestas que llenaron de actividad la rambla Pau Casals y el Centro de Servicios para la Tercera Edad, y que atrajeron a cientos de personas a lo largo de los dos días.
En cuanto a la muestra micológica, la entidad organizadora hace una valoración muy positiva, con cerca de un millar de visitantes y más de 5.000 kilómetros recorridos para encontrar los casi 200 ejemplares expuestos. “Viajamos hasta Sant Joan de l’Erm, Cantavella o Cerler”, explica Lluís Navarro, uno de los miembros de la entidad, “sin olvidar lugares más cercanos, como la sierra de Prades”. El domingo al mediodía, la degustación de setas volvió a ser el momento más esperado, con unas 500 raciones servidas y una gran afluencia de público. Ahora, los organizadores ya piensan en la edición de 2026, que marcará el trigésimo aniversario de esta actividad tan emblemática.
Paralelamente, el 18º Encuentro de Encajeras reunió el domingo a 189 participantes provenientes de una cuarentena de municipios diferentes. El buen tiempo y el ambiente festivo acompañaron la jornada, que se desarrolló entre las diez de la mañana y la una del mediodía. “Cambiamos la fecha de siempre para evitar los calores del verano, y la verdad es que ha funcionado muy bien; es posible que la mantengamos de cara a futuras ediciones”, detalla la concejala de Bienestar, M. Jesús Valldosera. La organización ofreció desayuno a todas las asistentes, y se realizaron varios sorteos con la colaboración del comercio local. Este año, además, la cita contó con un momento muy especial, ya que la giganta Clariana estrenó su propio cojín de encajera.
Desde el Ayuntamiento de El Morell se valora muy positivamente la respuesta del público y la implicación de las entidades, que mantienen vivo el tejido asociativo y la tradición en el municipio. “El hecho de que coincidieran los dos eventos hizo que el público pudiera disfrutar de las dos citas a la vez, lo cual fue beneficioso para todos”, concluye el concejal de Cultura y Fiestas, Miquel Roig.
