Un vecino de La Pineda, de solo 19 años, y con más de medio centenar de antecedentes policiales, ha vuelto a protagonizar un fin de semana intenso para los cuerpos de seguridad. El joven fue detenido dos veces en menos de un día y, en ambas ocasiones, quedó en libertad con cargos tras pasar a disposición judicial. Según ha adelantado en exclusiva el Diari de Tarragona, el sospechoso acumula un largo historial delictivo iniciado cuando aún era menor de edad.
El primero de los hechos se produjo en la madrugada del sábado en Salou, donde varios vecinos alertaron de un individuo que forzaba vehículos estacionados. Según fuentes policiales, el joven habría roto ventanas y rebuscado en el interior de varios coches, de donde se habría llevado objetos personales. Cuando intentaba abrir una furgoneta, una patrulla de Mossos apareció en el lugar y lo interceptó in fraganti, según el mismo medio.
Los agentes lo identificaron, y aunque el sospechoso había intentado deshacerse de los objetos sustraídos, los policías recuperaron parte del material robado. Fue arrestado y trasladado a comisaría. A la mañana siguiente, el juzgado de guardia lo dejó en libertad con cargos.
Sin embargo, su libertad no duró mucho. Pocas horas después, otra patrulla lo localizó en La Pineda, donde reside. Justo en ese momento, una alarma de un bar-cafetería cercano se activó. Al llegar, los agentes comprobaron que la puerta del local había sido forzada y que faltaban algunas cosas.
Tal como ha informado también el Diari de Tarragona, el joven fue encontrado bebiendo en la calle una botella idéntica a las sustraídas, y las imágenes de las cámaras de seguridad del bar confirmaron su identidad.
Con estas pruebas, los Mossos d’Esquadra lo volvieron a detener y volvió a pasar a disposición judicial el lunes. El juez, nuevamente, decretó su libertad con cargos, a la espera de juicio por un nuevo delito de robo con fuerza.
