El Centro de Convenciones de PortAventura fue ayer por la noche el escenario de la Diada de l’Enginyer 2025, una edición muy especial con la que se ha celebrado el centenario del Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Tarragona (CETIT). El acto, que reunió a más de 500 asistentes, fue presidido por el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, y contó con la participación de numerosas autoridades, entre ellas el alcalde de Salou, Pere Granados.
En su intervención, Granados felicitó al Colegio por su trayectoria centenaria y por su “contribución decisiva al progreso, la modernización y la transformación del territorio”. El alcalde subrayó que la de los ingenieros es “una profesión esencial, clave para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía e impulsar el desarrollo de nuestras ciudades y sociedades”.
El alcalde salouense puso en valor “el compromiso, la innovación y la responsabilidad” que caracterizan al colectivo, y felicitó especialmente a los galardonados y homenajeados por su aportación al mundo de la ingeniería. “El progreso y la calidad de vida de los ciudadanos son fruto, también, del ingenio, el talento y la capacidad transformadora de los ingenieros e ingenieras”, destacó.
Por su parte, Jordi Hereu felicitó al Colegio por alcanzar su primer siglo de vida, definiéndolo como “un ejemplo de cómo la unión hace la fuerza”, y puso de relieve la importancia de la colaboración entre profesionales para formar, transmitir conocimiento y transformar la sociedad.
El ministro reivindicó Tarragona como un polo de transformación industrial y motor de progreso, afirmando que “la actividad económica y la innovación son las herramientas que permiten transformar el territorio con responsabilidad, valores y profesionalidad”.
Un discurso europeísta y de valores democráticos
En un discurso de alto contenido institucional, Hereu reivindicó “la democracia como el mejor modelo de convivencia” e hizo un llamamiento a “fortalecerla ante aquellos que la quieren debilitar”. También reafirmó el compromiso del Gobierno con “Europa, las libertades, la igualdad, el respeto y la sostenibilidad social, ambiental y económica”, pidiendo “sumar esfuerzos para construir una sociedad más justa y democrática”.
Cien años de ingenio y de progreso
El decano del CETIT, Joan Gabriel Talarn, recordó la trayectoria de un colectivo “que ha sabido unir tradición y futuro, experiencia e innovación, técnica y compromiso social”. Talarn destacó “un siglo de progreso industrial y servicio al territorio”, e hizo un homenaje a los colegiados que celebran 25 y 50 años de trayectoria, definiéndolos como “auténticos protagonistas de la transformación tecnológica e industrial de nuestro país”.
Durante la velada se entregaron los premios de la XXXII edición del Trabajo Final de Grado “Lluís Roca García” y el VI Premio de Innovación y Sostenibilidad, así como la Insignia de Oro de la UAITIE a Santiago Crivillé. También reconocieron la labor de los exmiembros de la junta del Colegio.
El acto culminó con un recuerdo solidario por las Terres de l’Ebre, recientemente afectadas por la DANA, y finalizó con una cena de hermandad que ha reunido a profesionales, autoridades y representantes del mundo académico y empresarial en una velada que ha puesto de relieve el papel clave de la ingeniería en el progreso del territorio.