Este martes han comenzado las obras en el tramo comprendido entre la ronda Ibérica y la avenida de los Países Catalanes, dentro del proyecto de remodelación integral de la avenida de Vilafranca. Esta actuación supone una transformación urbanística de gran alcance que busca convertir este eje viario en un espacio más accesible y seguro para peatones y ciclistas.
La reforma prevé la construcción de un carril bici segregado y bidireccional, la mejora de las aceras con prioridad para los peatones, la plantación de nuevos árboles, la reorganización de los servicios y de los espacios de aparcamiento, así como la instalación de plataformas para las paradas de bus. Ya en el mes de julio comenzó la intervención en el tramo del Tacó, entre Países Catalanes y el puente de la C-31, y ahora se inicia la segunda fase.
Cambios en la movilidad y en el transporte público
Las obras comportarán modificaciones importantes en la movilidad de la zona. A partir de este miércoles, la avenida de Vilafranca tendrá sentido único (dirección mar) desde la calle del Bages hasta la ronda Ibérica. Esto quiere decir que no se podrá hacer el giro a la derecha, viniendo de la ronda Ibérica en sentido Cubelles, hacia los barrios de Armanyà y Tacó a través de la avenida.
También habrá cambios en el autobús urbano: la parada de la línea L68 situada delante del instituto Joaquim Mir se traslada a la rambla Pep Ventura, ya que el recorrido dejará de pasar por la avenida de Vilafranca.
Un proyecto consensuado con el vecindario
Según el Ayuntamiento, el proyecto se ha trabajado conjuntamente con las asociaciones de vecinos del Tacó y de Armanyà. El objetivo es reducir el tráfico de paso y priorizar los desplazamientos de proximidad, con estudios técnicos que apuntan a una reducción del 20-30% de vehículos.
El diseño del nuevo espacio prevé que el carril bici discurra paralelo a la acera, mientras que al otro lado habrá zonas ajardinadas, aparcamientos y las paradas de bus. El carril de circulación para vehículos quedará reducido a un sentido en la mayor parte del tramo, aunque se mantendrá el doble sentido desde la calle del Bages hacia la montaña.
El nuevo carril bici conectará la ronda Ibérica con el parque comercial y la zona de polígonos de la calle del Ciment.
Calendario previsto
La previsión municipal es que las obras de este tramo y del tramo iniciado en julio finalicen en el mes de noviembre, culminando así una actuación que quiere dar un carácter más vecinal, sostenible y verde a la avenida de Vilafranca.
