A raíz de las fuertes lluvias provocadas por la DANA que afectó a Vilafranca del Penedès el pasado 12 de julio, la erosión causada por el agua de escorrentía que bajaba por el camino de Sant Pau dejó al descubierto los restos de un tramo de un antiguo camino empedrado, que sigue, aproximadamente, el mismo trazado que el vial actual.
El aviso del descubrimiento fue hecho por un vecino, el señor Josep M. Feliu, tanto al Ayuntamiento de Vilafranca como al Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya, que activaron los protocolos pertinentes para su valoración patrimonial.
Según las primeras informaciones, se trata de un camino histórico de origen como mínimo medieval, que comunicaba Vilafranca con Pacs del Penedès pasando por el collado entre las montañas de Sant Pau y Sant Jaume. En Pacs, en aquel momento, había un castillo documentado desde principios del siglo XI y una iglesia románica. Este camino pasaría también por el lado del antiguo convento de los Capuchinos, construido en 1582 al pie de la montaña de Sant Jaume, y que fue trasladado a su emplazamiento actual, donde hoy se encuentra el cementerio municipal, en 1626.
Dado el posible valor patrimonial de los restos identificados, el Departamento de Cultura, en colaboración con el Ayuntamiento de Vilafranca del Penedès, ha decidido promover una intervención arqueológica de urgencia con el objetivo de documentar el tramo localizado y profundizar en el conocimiento de este elemento del patrimonio histórico local.
Esto conllevará a que, durante la semana del 11 de agosto, haya cortes puntuales en este camino. Una vez finalizada la intervención, se valorarán las actuaciones más adecuadas para poner en valor el camino y garantizar su preservación para las generaciones futuras.
