Un hombre ha sido condenado a seis años de prisión por una agresión sexual cometida la madrugada del 16 de mayo de 2024 en la canalización del río Segre, en Lleida. La sentencia de la Audiencia de Lleida lo considera responsable de haber forzado a un chico a practicarle una felación y de haber intentado penetrarlo contra su voluntad. Además, el tribunal le impone cinco años de libertad vigilada una vez salga de la prisión y lo obliga a indemnizar a la víctima con 10.000 euros por los daños causados.
Los magistrados han valorado como coherente, precisa y creíble la declaración del joven agredido, que mantuvo una versión consistente a lo largo de todo el proceso. Por contra, han desestimado el argumento de la Fiscalía, que pedía una pena de 12 años por agresión sexual continuada, y también las alegaciones de la defensa, que sostenía que la relación había sido consentida.
Según el relato de la víctima, ambos se conocieron a la salida de un pub de la calle Panera y él aceptó acompañar al acusado hasta el barrio de Cappont. Al llegar a la zona del río, el procesado lo tiró al suelo, lo inmovilizó y lo obligó a hacerle una felación, y después intentó penetrarlo analmente.
El acusado, en cambio, aseguró ante el tribunal que había sido el joven quien le había hecho insinuaciones durante el trayecto y que no hubo ninguna agresión. La defensa insiste en que no existen pruebas físicas ni testigos directos y que los Mossos d’Esquadra no interrogaron a otras personas que podrían haber estado en la zona.
Sin embargo, la sala ha rechazado estos argumentos y considera probado que el procesado actuó con violencia y sin consentimiento. La defensa ya ha anunciado que recurrirá contra la sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).