El Grupo Municipal de ERC en la Paeria de Lleida ha votado en contra del Presupuesto General del Ayuntamiento para el ejercicio 2026 al considerar que no responde a las necesidades reales de la ciudadanía ni mejora de manera sustancial el día a día en los barrios, y que consolida un modelo de ciudad basado en anuncios, titulares y primeras piedras, pero alejado de la realidad cotidiana.
Durante su intervención en el Pleno, la portavoz del grupo, Jordina Freixanet, ha defendido que “este presupuesto no es solo un conjunto de números, es la expresión de un modelo de ciudad”, y ha advertido que “ERC y el gobierno municipal tenemos modelos de Lleida claramente diferentes”. Freixanet ha remarcado que el proyecto presentado “no apuesta por una transformación social real, ni por un urbanismo que genere cohesión, ni por una economía que ponga la vida en el centro”.
Tras el Pleno y en una atención a los medios de comunicación, Freixanet ha remarcado que “este presupuesto está pensado desde el despacho y no desde la calle” y ha emplazado al alcalde Larrosa a sentarse a negociar y buscar soluciones hasta el 31 de diciembre, fecha en la que se celebrará un nuevo pleno para debatir sobre los presupuestos.
Según ha explicado, “la gente no entiende de partidas presupuestarias, entiende si el barrio está limpio, si el bus llega, si el comercio aguanta y si los servicios públicos responden”. En este sentido, ha insistido en que “mientras se habla de grandes proyectos, la ciudad continúa acumulando problemas pequeños, pero constantes que afectan al día a día de la mayoría”.
Freixanet ha recordado que ERC puso sobre la mesa una abstención de mínimos, basada en tres ejes claros: movilidad pública, actividad económica y comercio de proximidad y vivienda como derecho, y ha lamentado que “el gobierno haya preferido llegar al Pleno sin negociar y refugiarse en el victimismo en lugar de buscar acuerdos”.
En cuanto a movilidad, ERC ha votado en contra de la prórroga del contrato del servicio de autobuses urbanos hasta 2027. El concejal Juanjo Falcó ha advertido que “no estamos ante una prórroga técnica, sino ante una decisión política que hipoteca el futuro del transporte público de Lleida”, y ha defendido que “el bus debe ser una alternativa real al vehículo privado, y eso solo es posible con capacidad de decisión pública”.
Durante el mismo Pleno, Jordina Freixanet también ha intervenido de manera contundente en el debate de la moción presentada por VOX sobre empadronamiento, rechazando cualquier intento de utilizar el padrón como herramienta de control o exclusión. Freixanet ha defendido que “el padrón es un derecho y una obligación legal, no un instrumento ideológico”, y ha alertado que “cuando se cuestiona el acceso al padrón, no solo se vulneran derechos individuales, sino que se pone en riesgo la cohesión social y la democracia”.
La portavoz republicana ha denunciado que “este tipo de discursos deshumanizan, señalan colectivos vulnerables y normalizan marcos propios del autoritarismo”, y ha advertido que “cuando se juega con los derechos básicos, lo que se quema no es un colectivo concreto, sino el sistema democrático”. ERC ha reiterado que Lleida “debe ser una ciudad de derechos, de acogida y de convivencia, no un espacio de persecución ni de sospecha permanente”.
Finalmente, Freixanet ha hecho un ruego para que la ludoteca Arenys del Segre, que cierra el 31 de diciembre, forme parte de la red de ludotecas, y si esto no es posible, llegar a un acuerdo con la asociación de vecinos para que este equipamiento continúe funcionando.
