La Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (FAADA) ha presentado una denuncia penal en el Juzgado de Instrucción de Balaguer y también una denuncia administrativa a raíz de un presunto delito continuado de maltrato animal por omisión. Los hechos han tenido lugar en la capital de la Noguera, en un recinto donde se encuentra una colonia de gatos comunitarios gestionada por la asociación local 'SOS Bigotis de Balaguer'. Según FAADA, esta colonia se ha visto gravemente afectada después de que los arrendatarios del espacio cambiaran el candado de acceso, impidiendo así la entrada de la cuidadora autorizada por el Ayuntamiento, quien hasta entonces gestionaba la alimentación y cuidado de los animales.
Los animalistas aseguran que existía un acuerdo previo con la propiedad, que autorizaba la entrada de la cuidadora, pero ahora, con este cambio de candado, se han producido varias muertes de gatos, una situación que FAADA considera "intolerable". La Fundación subraya que, según la ley, los ayuntamientos son los responsables de la gestión de las colonias felinas y deben garantizar que las personas cuidadoras autorizadas puedan acceder a los recintos, incluso cuando estos sean de titularidad privada. Impedir este acceso puede derivar en responsabilidades legales, tanto administrativas como penales, por comprometer el bienestar y la vida de los animales. Realmente, sin embargo, es muy difícil poder ejercer acciones sobre las propiedades privadas, en gran parte debido a trámites administrativos.
En las dos denuncias presentadas, una en el Ayuntamiento, FAADA exige que se tomen medidas cautelares inmediatas para garantizar la alimentación, hidratación y atención veterinaria de los animales afectados. Además, piden que el Ayuntamiento cumpla con sus obligaciones legales de supervisión y protección de las colonias felinas, evitando que se repitan situaciones de desprotección como esta, a pesar de que el consistorio sí que ha mantenido reuniones y comunicación con la asociación.
